Con un coste de 10.000 millones de euros, gestionará 90 millones de pasajeros y pretende llegar hasta los 200 millones en pocos años.
El aeropuerto de Estambul cuenta con más de 500 puestos de facturación, más de 140 puertas de embarque y 42 kilómetros de cintas transportadoras para maletas.