Nexo es la fusión entre la cocina tradicional, de temporada y la de vanguardia con elegancia en el detalle tanto de los platos como de la presentación, en una carta breve pero con personalidad, calidad y que está en constante perfeccionamiento, con un gran trato que te dispensa Paz, su jefa de sala.
Desde que abriera sus puertas en enero de este año en el número 76 del Paseo del pintor Rosales, tratan de hacerse un hueco en el cada vez más nutrido mundo de la gastronomía madrileña.
El restaurante Nexo cuenta con un amplio local de dos plantas. En la sala a pie de calle te encuentras con una imponente barra de hormigón pulido de color gris antracita y forma serpenteante con sillas altas para picotear. También cuenta con un par de mesas altas y una baja, perfecta para clientes con problemas de movilidad. En la misma planta hay un reservado con vistas a la cocina y que se comunica de forma interna con el parking.
En la planta baja, a la que llegas tras bajar por una amplia y luminosa escalera, preside la amplia sala un imponente cuadro que acompaña a las mesas de cristal y dos rincones privados perfectos para dos personas. Además, un amplio reservado de hasta 16 personas y otro más pequeño, para 8 comensales, en la cava con una luz tenue y mucho encanto.
Una vez descubierto el restaurante y sentado en tu mesa, te reciben con un muy buen aperitivo de una gilda desestructurada con una esferificación de aceituna, que explota en tu boca, una piparra con anchoa y un pan con aceite.
El chef Carlos Barasoain, de origen navarro y con una amplia trayectoria en Cabo Mayor y en los mejores restaurantes de Francia, se encarga de elaborar esta carta que aúna tradición y vanguardia para que los sabores de siempre te desvelen nuevos detalles que no te dejen indiferente. Como el lingote de foie de pato con naranja sanguina texturizada, un entrante perfecto para ir abriendo boca.
Además, los platos cuentan con una original presentación para que te entre también por los ojos. Los puerros a la brasa con fondo oscuro de setas y crujiente de trigo (14€) es un muy buen plato de temporada, perfecto para compartir, con un gran sabor y con una mezcla de texturas que deleitará tu paladar.
Uno de los platos que tienes que probar si reservas en Nexo es el brioche relleno de cochinillo deshuesado con toques picantes y cebolla encurtida (15€). La mezcla del pan enriquecido con leche, huevos y mantequilla, con la carne del cochinillo y el picante junto con la cebolla encurtida es sencillamente un bocado delicioso.
El dueño del restaurante –y de La Churrasquita– también pone mucho énfasis en las carnes. Como buen argentino, Eduardo Martín, que lleva muchos años afincado en Madrid, trae las mejores piezas de carne Discarlux para los amantes de este manjar. Así probamos un buenísimo lomo alto black angus certificado acompañado de pimientos del piquillo confitados y patatas con mojo picón (26€).
Para rebajar y terminar en condiciones, un postre refrescante perfecto para la temporada estival: la burbuja de gin tonic con sorbete de mango y bayas de enebro (9€).
Este restaurante con aires modernos y toques clásicos es perfecto para organizar eventos, almuerzos o cenas de empresa, con amigos o familia y con tu pareja puedes aprovechar de uno de los dos rincones románticos de Nexo, todo con un ticket medio de 55€.
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