Baan se ha convertido en poco tiempo en uno de los mejores restaurantes de comida tailandesa de Madrid gracias a que su carta cuenta con el mejor producto local como el cerdo ibérico, la vaca gallega, los pescados y mariscos de lonja, todo al servicio de las técnicas y recetas tradicionales de Tailandia.
Baan significa casa en tailandés y el chef Víctor Camargo lo ha convertido en el hogar de la cocina del sudeste asiático con una creatividad puesta para satisfacer al comensal, con sus divertidos y potentes sabores.
Desde que entras en el restaurante, su interiorismo te embauca y te lleva a la Tailandia imperial. El elemento principal es una estructura de madera y hierro recubierta con una malla de piel que crea un pequeño techo con forma sinuosa inspirado en las formas que se crean entre los arrozales. Este camino genera un efecto espectacular tanto desde la planta baja donde se ubica el restaurante como desde la primera planta que alberga su Cocktail House con una barra propia de alabastro retroiluminada y un reservado para los encuentros más íntimos, con capacidad para ocho personas y con vistas a la planta baja del restaurante.
Para la decoración de este elegante espacio, estudio Cousi ha tomado su inspiración en el estilo colonial del sudeste asiático, combinando patrones de repetición de dibujos orgánicos, piezas antiguas, pieles y telas teñidas a mano en colores tierra que forman un techo a modo de jaima, que se combinan con telas azul índigo que dejan entrever alguna máscara tailandesa puntualmente iluminada. Además cuenta con una terraza para disfrutar de las buenas temperaturas de la capital.
Pero a BAAN vas a ir, porque tienes que ir si no has ido ya, a probar su cocina, pensada sobre todo para compartir. Por eso empezamos con un magnífico tiradito de lomo de atún rojo (21€), con kimchi blanco, vinagreta coreana de semillas y especias tostadas acompañado con pan pappadum crujiente.
En ese afán por compartir también tienes la opción de pedir deliciosos bocados por unidades como las ostras fritas (6€ unidad), estilo japo-orleans con salsa tártara de encurtidos y barbacoa de manzanas. O las samosas indias (6€ unidad), rellenas de curry suave de coliflor, boniato y queso de cabra con chutney de ciruelas, tamarindo y hierbas aromáticas. Otro delicioso bocado que llega a la mesa para ser emplatado es el nem vietnamita (7€ unidad), de pollo de corral y langostinos envuelto en lechuga fresca, hierbas vietnamitas seleccionadas y nuoc cham –sencilla salsa con un toque salado y ácido– de remolacha, chile y lima.
Como se aprecia, la cocina de Víctor Camargo bebe de Asia, con sus técnicas y sabores intactas. El chef ha pasado por las prestigiosas cocinas de Sudestada, Viavélez, Mugaritz y Casa Bonay y de ese bagaje propone en la carta una combinación de temperaturas, colores y sabores, a menudo con matices picantes que trasladan a los comensales a la Tailandia más gourmet.
"Lo que queremos mostrar con esta nueva carta es que se puede dar una vuelta a los platos a los que estamos acostumbrados y educar al paladar para perder el miedo a probar platos diferentes y exóticos gracias a elaboraciones propias que aúnan lo mejor de España y Tailandia", afirma Víctor Camargo.
Y para deleitar tu paladar puedes terminar con un inmenso curry amarillo con carrillera de vaca (26€), carne guisada en el curry, con tamarindo, leche de coco y lima, acompañado de arroz jazmín aromático y hierbas tailandesas.
La propuesta líquida de BAAN se presenta como una declaración de intenciones para los más disfrutones y exigentes con una amplia selección de cócteles clásicos y de autor a cargo de Daniele Merli, con grandes destilados y 125 referencias de vino, con más de 20 espumosos y otras 25 etiquetas internacionales.
Pero no te puedes ir de BAAN sin que pedir la tarta de queso fluida (9€), con miso blanco, galleta de jengibre, helado de canela y crujiente de sésamo y sake templado. Sencillamente espectacular, una de las mejores que he probado y que te devuelve a tu casa con un gran sabor de boca.
Esta visita a la casa de la comida de Tailandia es perfecta para disfrutarla con amigos, familia, pareja o para una reunión de trabajo. Además en su Cocktail House puedes disfrutar de una amena sobremesa. El ticket medio del restaurante es de 45-60€ y la cocktail house es de 30-40€.
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