Llega la Navidad y con ella vuelven los tradicionales mercadillos navideños. Muchas son las ciudades del mundo que se han sumado al carro de llenar sus principales plazas con puestos repletos de regalos, gastronomía y productos locales. Proponemos un recorrido por diez de estas ciudades europeas, con un extra viajero más relacionado con la cultura y el vino, aunque también con esta época tan señalada.
Múnich
La capital de Baviera, al sur de Alemania, es una de esas ciudades perfectas para pasar la época navideña. Desde que comienza el adviento, la ciudad se llena de puestos de regalos, adornos o especialidades gastronómicas que solo pueden degustarse en Navidad. Entre sus calles destaca el ayuntamiento de estilo neogótico y su campanario, Marienplatz, la estatua de la patrona de la ciudad, Neuhauser Strasse, la feria de belenes más grande de Alemania y el gran árbol de Navidad
Una vez en la ciudad, es posible aprovechar para acercarse hasta el castillo de Neuschwanstein, anidado en la cima de una montaña sobre el pueblo de Hohenschwangau, toda una fantasía románica del siglo XIX .
Viena
La magia de la Navidad se respira por las calles de esta ciudad palaciega y vibrante que se aprecia desde el ayuntamiento, sus plazas, palacios, hasta sus callejuelas. Los mercados navideños en Viena son verdaderamente una tradición. En sus más de 150 casetas de madera hay juguetes y regalos, adornos, dulces y ponche caliente. También se encuentran los típicos carruseles para los niños y divertidos talleres. Pasear por la Michaelerplatz, ver la Catedral de San Esteban y sus alrededores o la Plaza de los Héroes, son algunos de los puntos más navideños de Viena.
París
En la capital francesa destaca el famoso Mercado de Navidad de los Campos Elíseos, con su preciosa noria y sus pequeñas cabañas de madera, también el Mercado de Navidad en la Défense, el más grande de la ciudad y uno de los más pintorescos. Por otra parte, los parisinos son amante de las decoraciones navideñas, por lo que subirse a uno de los típicos autobuses turísticos descapotables para un recorrido nocturno y ver las luces es una idea estupenda.
Copenhague
En Navidad, las calles capital danesa se llenan de luces y de guirnaldas que dan otro aire a la ciudad, a pesar del frío. Copenhague es conocido por sus mercadillos de Navidad, en los que comprar desde artesanía local y productos de lana, hasta platos típicos de la época. Uno de los más singulares es el que se lleva a cabo en el Zoo de Copenhague, con un ambiente navideño aderezado con una gran cantidad de experiencias y actividades, como un encuentro con Papá Noel o más de 30 puestos para comprar adornos y regalos. El parque del Tivoli. El parque más famoso de la ciudad danesa y concentra durante estas fechas buena parte de la magia navideña.
Budapest
La ciudad de Budapest es considerada como uno de los mercados más bonitos de Europa, con la feria de la plaza Vörösmarty, ya abierta y se puede disfrutar hasta el 31 de diciembre. Merece la pena visitar es el mercado que se encuentra en la Plaza de San Esteban, conocido como "Adviento en la Basílica". Es uno de los mercadillos de Navidad más importantes de la ciudad.
Praga
Entre los mercadillos navideños que cada año atraen a miles de enamorados de las luces de esta época están los de Praga: el de la Plaza de la Ciudad Vieja cuyos arcos luminosos y su gigantesco árbol son una invitación al selfi y donde la tentación habita en cada uno de sus puestos (sin olvidar el famoso reloj astronómico) el de la Plaza de la Paz, presidido por la iglesia de Santa Ludmila, y el de la Plaza de Wenceslao con el monumental Museo Nacional observando la escena.
Zagreb
La principal atracción de este mercadillo en las fechas navideñas es una enorme pista de patinaje sobre hielo, donde además, muy cerca se pueden escuchar villancicos al aire libre en el monumental Pabellón de Música construido en 1891. A los pies de la catedral de Zagreb, al norte de la ciudad, se puede disfrutar de un curioso belén viviente que sorprende a quienes lo visitan.
Dresde
Este es uno de los más grandes y auténticos de Alemania. Su origen se remonta al año 1434 y, desde entonces, se ha convertido en un gran evento que reúne a más de 200 puestos y que atrae a millones de turistas de todas partes del mundo. La Plaza Altmarkt, donde degustar una gran variedad de delicias culinarias y productos tradicionales alemanes, es algo a tener en cuenta. Es el mercadillo de Navidad más antiguo de Alemania.
Basilea
En esta ciudad de Suiza se llevó el pasado 2021 el primer premio al Mejor mercadillo navideño de Europa, sigue siendo una opción estupenda. Con una arraigada tradición en estas fiestas, esta ciudad suiza se transforma por completo y su casco antiguo se llena de luces, abetos y guirnaldas de todos los colores. Se montan varios mercados, pero destacan especialmente el de Barfüsserplatz y el de Münsterplatz, una de las plazas más bonitas.
Barcelona
En la lista, una ciudad española con uno de los mercados más tradicionales es el que tiene lugar (desde 1786) junto a la Catedral de Barcelona, la Feria de Santa Lucía, que este 2022 se celebra del 26 de noviembre al 23 de diciembre.
También en el Recinto Modernista de Sant Pau desde el 22 de noviembre hasta el 16 de enero se puede ver Les Llums de Sant Pau, donde la Navidad y la arquitectura se combinan para ofrecer un divertido paseo de cuento de hadas para toda la familia.
Extra: el nuevo barrio cultural de Oporto
El distrito cultural de Gaia vuelve a recrear la magia de las fiestas con una programación diaria, que comienza el 26 de noviembre, con el encendido de las luces de Navidad, y termina el 8 de enero. Además del árbol de Navidad, este año WOW va a tener también en su plaza central un tiovivo y un área exclusiva dedicada a los niños.
El programa especial "WOW, é Natal!" se une a las propuestas habituales del distrito cultural, en particular a los siete museos y los workshops de la Escuela del Vino y del Museo del Chocolate. Además, WOW ofrece vales regalo para aquellos que quieran tener un detalle de Navidad, pudiendo incluir uno, dos o más museos, o también para una cata en la Escuela del Vino.