Cuando planificamos un viaje o una escapada para desconectar en mitad de la nada en plena naturaleza suele venirnos a la cabeza esos paisajes idílicos como los que ofrece Noruega o Suiza, pero la realidad es que España posee increíbles paisajes que nada tienen que envidiar a los grandes destinos naturales de Europa. Somiedo es uno de esos reductos de la naturaleza y la paz, con montañas que se elevan desde los 400 metros a los casi 2.200, con impresionantes lagos glaciares como los de Saliencia y del Valle, casa típicas para los vaqueiros o ganaderos en un tiempo pasado y una serie de pueblos y aldeas habitados por gentes amables, abiertas, generosas y sobre todo con esa forma de ver la vida sin prisas y sin atropellos.
Somiedo fue el primer espacio asturiano declarado Parque Natural en 1988. Y posteriormente en el año 2.000 como Reserva de la Biosfera. Ese galardón lo tiene bien merecido ya que esta maravilla del norte de España, con un ecosistema propio tiene un vecino animal que ya habitaba Somiedo antes que los humanos: el oso pardo cantábrico.
Existen diferentes rutas de avistamiento de este animal en su hábitat natural, aunque (según cuentan los rumores locales) en algunas ocasiones baja a los pueblos, se da un paseo o incluso un baño en alguno de los ríos cercanos.
Algunas rutas de montaña recomendadas
Ruta del Valle del Lago
A unos 30 minutos en coche desde Pola de Somiedo. En esta ruta, apta para todas las edades, encontraremos los restos de algunos lagos glaciares, que aún mantienen el recuerdo de otra era, mucho más fría.
Ruta de Saliencia
Saliencia es otra de esas zonas de Somiedo que tiene una hermosa ruta, porque los lagos de Saliencia tienen merecida fama de ser uno de los lugares más bellos Asturias. Se dejarán ver tras una caminata circular de 15 kilómetros, sencilla, con dificultad media.
Saliendo desde el pueblo de Saliencia, último núcleo rural del valle del mismo nombre, una carretera conduce al alto de la Farrapona. Durante el camino encontraremos la Mina de Santa Rita, actualmente abandonada. En la cumbre en verano se suele colocar un puesto de hamburguesas materializado en un pequeño camión al más puro estilo street food. Tras unos kilometros subiendo y bajando sus cumbres y recorriendo sus rutas, el hambre no tardará en llegar.
Ruta De Castro
Comienza la ruta en el área recreativa de la Malva, situada junto a la carretera AS-227, a medio camino entre Castro y Pola de Somiedo, y desde donde se disfruta de una hermosa panorámica de la entrada del Valle de Somiedo. Esta ruta es ideal para contratar un paseo a caballo que a los más pequeños les fascinará.
En cuanto a la gastronomía, Asturias se vende sola en este sentido, aunque es recomendable recordar sus manjares: la sidra, imprescindible. Su fbada asturiana y el cachopo, dos platos obligatorios en una escapada o un viaje algo más largo y sobre todo, es una estupenda forma de recuperar fuerzas después de alguna ruta. En la capital de Somiedo, Pola, encontraremos dos restaurantes para disfrutar de estos y otros atractivos gastronómicos de la zona: Sidrería Carion y Casa Miño.