El tecnosexo. Sexo tecnológico. O, si quieren, sexnología, o cómo ha transformado la red y las máquinas las relaciones sexuales entre personas. Carne y circuitos. En la última edición de Es Sexo, Eva Guillamón presentó a los oyentes las últimas novedades en este área, y discutió sobre si es conveniente o no -inevitable parece que sí- que el ser humano se adentre en este desconocido terreno.
Lo cierto es que, queramos o no, el ser humano es sexual. El primer vibrador data de antes de la plancha eléctrica, y según se consideró en su origen, ayudaba a sanar a la mujer mediante el placer. Ahora, con la unión de sexo y tecnología, las máquinas acaban de hacer definitivamente su acto (nunca mejor dicho) de aparición en este terreno.
Tal y como explicó Eva en esRadio, 2015 es el año en el que este sector alcance su cénit. Según un estudio de Lelo, empresa dedicada precisamente a estos menesteres, el 74% de los encuestados no le diría que no a eso de poseer un juguete sexual, objetos llamados a potenciar la satisfacción sexual del sujeto. Parece que el sexto y la tecnología están ya aliados dentro de la cultura popular. Y si no lo creen, piensen en el éxito de Cincuenta sombras de Grey...
Para el especialista en adicciones sexuales Robert Weiss el tecnosexo no es bueno o malo de por sí, sólo un paso más de la transformación humana. De modo que sólo cabe adaptarse de una manera crítica... Más en el audio de Es Sexo.