
Desde que el Gobierno de Pedro Sánchez aprobó que el lobo sea intocable a través de su inclusión en el LESPRE, cada día se han registrado 35 ataques al ganado en nuestro país, lo que supone un incremento del 20% con respecto a años anteriores, según los cálculos realizados por los Servicios Técnicos de COAG. Si en el año 2021 se registraron 10.560 ataques, en 2022 la cifra ha subido hasta los 12.898.
El incremento de los ataques de lobos al ganado no sólo se producen en Asturias, Cantabria, Galicia, Castilla y León o La Rioja (las Comunidades Autónomas con más presencia de manadas), sino que se trata de una situación generalizada en el resto de Europa. Por este motivo, la Comisión Europea está recabando información actualizada sobre la incidencia de este depredador para decidir si es necesario relajar las normas que regulan la protección de este animal.
El plazo para presentar la información sobre los ataques finalizó el pasado viernes 22 de septiembre y los Gobiernos autonómicos de Asturias, Cantabria, Castilla y León y Galicia han entregado a la Comisión Europea los informes actualizados sobre el estado de conservación del lobo que, a diferencia de lo que ha trasladado el Gobierno de España, es "favorable", según han denunciado. Es decir, que el número de ejemplares ha aumentado mientras que el Ejecutivo de Pedro Sánchez asegura que desciende.
Los consejeros también han censurado que el informe sexenal de seguimiento enviado por el Gobierno de España sobre el lobo contiene "errores incomprensibles" y "no responde a la verdad", ya que concluye que el estado de conservación de la especie es "desfavorable e inadecuado", algo que "no es real".
Las cifras reales
Los daños causados por el lobo a la cabaña ganadera asturiana aumentaron en 2022 un 12% respecto al año anterior con un total de 2.476 ataques. Este mismo estudio calcula la existencia de 40 manadas, el doble de las contabilizadas en el año 2000. Este incremento de los ataques ha supuesto que el importe de las indemnizaciones por los daños haya pasado de 784.192 euros de 2021 a cerca de un millón en 2022 (en concreto, 927.211, euros).
En el caso de Galicia, la Xunta ha enviado un documento sobre el estado global de conservación del lobo en la región durante el período 2013-2018, una información que ya había sido remitida al Gobierno central en 2019 para la elaboración del informe sexenal solicitado por la Unión Europea a todos los estados miembros, "unos datos que, finalmente, el Ministerio no llegó a incluir en su informe", denuncian desde la Xunta. Según este documento, hay 93 manadas reproductoras en Galicia (alguna de ellas compartida con otros territorios) frente a las 90 del estudio anterior. Se han contabilizado 2.251 ataques. Además, en los últimos ocho años, la Xunta ha concedido ayudas por un importe total de 8 millones de euros.
En Castilla y León, durante el primer semestre 2023 los ataques de este cánido han aumentado un 29% con respecto al mismo periodo de 2021, según los datos de la Consejería de Medio Ambiente, con 1.717 asaltos y 2.705 animales muertos. La cifra se dispara hasta el 35% si se comparan los datos de 2019. Además, al cierre del ejercicio 2022, la Junta pagó casi dos millones de euros en concepto de indemnización por daños de este animal a las explotaciones ganaderas.
La Rioja registró 696 ataques de lobos en 2022, casi el doble que un año antes. La Consejería de Agricultura tiene constancia de cuatro manadas reproductoras con hasta 38 ejemplares y otra itinerante.
A lo largo de 2022, Cantabria ha contabilizado unos 4.600 ataques de lobo. Si se tienen en cuenta las reses muertas o heridas por ataques de lobo en los últimos cinco años, la cifra se eleva a los 8.200 animales. Es decir, más de la mitad de los ataques se han producido en el último año.
"Es el momento de realizar una profunda reflexión sobre el efecto de una medida ultra proteccionista tomada sin atender a razones objetivas sobre la situación real de la especie, que está en expansión y no en peligro, y sin escuchar a las zonas y sectores más afectados", ha señalado el portavoz de Ganadería y Lobo de COAG, Gaspar Anabitarte. "El 22 de septiembre acababa el plazo de la Comisión Europea para que se trasladen datos actualizados del censo real de lobos que hay en España y nos consta que los datos que han traslado las Comunidades Autónomas evidencian que Teresa Ribera se pasó de frenada e hizo caso omiso a aquellos datos que no justificaban su iniciativa", ha subrayado.