Nada del rumoreado Andrómeda ni más sorpresas que unas gafas de realidad virtual. La presentación de Google ha sido bastante previsible. El principal anuncio ha sido el primer móvil diseñado por la empresa de Mountain View: Pixel. Con dos tamaños de pantalla (5 pulgadas y 5,5) y sus dos correspondientes tamaños de batería (2.770 y 3.450 mAh, respectivamente) y resoluciones (Full HD y 2K), las especificaciones son de gama alta: procesador Qualcomm Snapdragon 821, 4GB de memoria RAM, 32 o 128 GB de almacenamiento, conector USB-C y de auriculares, protección de pantalla Gorilla Glass 4, sensor de 12 megapíxeles y lector de huellas.
En cuanto a diseño, cuenta con un cuerpo de aluminio con dos tonos de color en la parte trasera que le confieren cierta originalidad, aunque habrá que verlos en directo para dar un juicio definitivo sobre su aspecto. El lector de huellas está en la parte trasera, un detalle que se va casi estandarizando. Y la cámara cuenta con apertura f/2.0, una cifra que se antoja algo escasa respecto a sus competidores, pero pese a ello la publicación especializada DXO Mark asegura que tiene un comportamiento excelente con poca luz. Google también ha destacado su estabilizador de imagen para grabar vídeos sin saltos.
Google ha centrado buena parte de su presentación en su asistente personal, que estará preinstalado en este teléfono. La idea de la compañía es que este software sea para nuestros datos personales lo que el buscador es para la web. Podremos preguntarle cosas como haríamos con Google Now, pero hace cosas como entender el contexto (si estamos hablando de un restaurante con la parienta, por ejemplo) para respondernos, etc. Pero definitivamente la novedad que enamorará a más de uno es que incluye el almacenamiento ilimitado de fotos y vídeos, incluso en resolución 4K, en Google Photos completamente gratuito.
No obstante, los teléfonos Pixel no van a salir en España por ahora y conociendo a Google pueden tardar bastante en estar disponibles. La compañía ya se olvidó al año pasado de su antigua práctica de buscar precios contenidos, así que la opción más barata de este Pixel alcanza los 649 dólares. Como detalle curioso, incluirá una aplicación para hacer más cómoda la migración desde un iPhone.
Router wifi, asistente en el hogar y otras novedades
Además del teléfono, Google ha presentado otros dispositivos. Al que más tiempo ha dedicado es a Google Home, un pequeño altavoz del tamaño y casi la forma de una maceta que escucha continuamente a que digas "Ok Google" para activarse y que puedas interactuar con él mediante la voz tal y como harías con el asistente personal en el teléfono. La idea la lanzó primero Amazon con su Echo.
También han presentado un router wifi llamado, con gran originalidad, Google Wifi. Pensado para mejorar la conexión inalámbrica del hogar, sólo dispone de dos puertos Ethernet y, si usamos uno para conectarlo al router de fibra o la conexión desde donde nos llegue internet, sólo tendremos otro disponible. La idea de la compañía es que sea fácil de instalar y usar y permita usar varios en casa para mejorar la cobertura. De hecho vende un pack de tres unidades por 299 dólares, además de poder comprar uno sólo por 129.
La empresa ha renovado su popular Chromecast, el aparato para convertir cualquier televisión en una Smart TV controlada desde el móvil. El nuevo Chromecast Ultra sube su precio de 39 a 79 euros, pero a cambio dispondremos de resolución 4K, más velocidad a la hora de empezar a emitir el vídeo, mejor soporte wifi y conexión Ethernet por si con el wifi no nos llega.
Por último, la presentación que quizás ha sido más sorprendente ha sido la de Daydream View, sus gafas de realidad virtual. Al igual que Samsung Gear VR están pensadas para usar el móvil, en este caso el Pixel, como pantalla. Móvil y gafas se entienden sin necesidad de conectarlas por cable. Está construido con ayuda de diseñadores de moda y materiales suaves tipo microfibra, lo que le da sin duda un aspecto original, aunque no tanto como las gafas de cartón del proyecto Cardboard. Incluye un mando que, para evitar pérdidas, se guarda dentro de las propias gafas en el hueco reservado al móvil cuando no lo usemos. Costará 69 euros en Alemania, que es el precio más cercano al que tendremos aquí, seguramente.