
Manuel Piñuela es el ingeniero eléctrico que ha desarrollado Freevolt, un sistema para cargar los dispositivos conectados a través del Internet de las Cosas, que aprovecha la energía que flota en el aire.
Dispositivos con sensores que miden el tráfico de las ciudades, aparatos inteligentes que contribuyen al ahorro energético de las empresas y hasta altavoces que controlan los hogares. Estos dispositivos conectados se comportan de forma automática gracias a la información que recopilan y hacen más sencillo el día a día.
Las tecnologías del Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés) han construido este mundo conectado, pero estos aparatos necesitan cables y baterías para funcionar y eso limita sus aplicaciones. Para solucionar este inconveniente, el ingeniero eléctrico Manuel Piñuela ha desarrollado Freevolt, un nuevo modelo de cosecha de energía y carga inalámbrica. Se trata de un sistema que recicla la energía que flota en el aire y que alimenta directamente los aparatos.
¿Cómo lo hace? Este innovador mexicano, fundador de la empresa Drayson Technologies, saca partido de las pequeñas cantidades de energía que contienen las ondas electromagnéticas procedentes de señales de radio, televisión y WiFi. Para conseguirlo utiliza un circuito electrónico (rectificador) que convierte la energía de corriente alterna a corriente continua para después cargar por goteo pequeñas baterías. De esta manera, los dispositivos se pueden ir cargando poco a poco con energía ambiente.
Piñuela comenzó a gestar su idea entre los años 2008 y 2009, cuando trabajó en la industria petrolera en Texas (EE. UU.). En ese momento, descubrió la dificultad de proporcionar energía a los sensores del IoT, así como de extraer datos del propio proceso. Después, durante su doctorado en Dispositivos ópticos y semiconductores en el Imperial College de Londres (Reino Unido), dio forma a Freevolt.
Tras desarrollar esta tecnología, comenzó a trabajar en otras como Sensyne, que administra sensores de IoT desde la nube. A través del aprendizaje automático, controla y calibra estos sensores. Con ello consigue optimizar su uso y reducir los costes de energía.
Con Freevolt y Sensyne como base, ha creado una nueva gama de productos que combinan el IoT con la inteligencia artificial para beneficiar a sectores como la salud y el medio ambiente. Por ejemplo, CleanSpace recopila datos de más de 31 países sobre el nivel exacto de contaminación al que se exponen las personas.
Después, proporciona esta información a organizaciones del ámbito sanitario. De forma paralela ha desarrollado SEND, un sistema que monitoriza a personas enfermas en su hogar con el objetivo de ayudar a los médicos a tomar decisiones y facilitar las gestiones hospitalarias.
Piñuela, que ha sido seleccionado como Innovador menor de 35 de Latinoamérica 2017 por MIT Technology Review en español, huye de la idea de implantar la tecnología simplemente porque se trate de algo novedoso: "La tecnología sólo debe existir si está generando prosperidad. No se trata de que genere prosperidad sólo para algunos, sino que debe ser para muchos". Para él, la tecnología de vanguardia debe ayudar a resolver problemas concretos, ya sea mejorar la calidad del aire o crear tratamientos personalizados para cada paciente. Según Piñuela, sólo así la tecnología contribuirá al progreso de la sociedad.
Fuente: Opinno, editora de MIT Technology Review en español.