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Samsung S20: probando un móvil premium durante la cuarentena

Samsung es el líder de la gama alta de Android y lo vuelve a demostrar con el S20, el móvil al que siempre mira la competencia como el rival a batir.

Samsung es el líder de la gama alta de Android y lo vuelve a demostrar con el S20, el móvil al que siempre mira la competencia como el rival a batir.
La maravillosa pantalla del S20 en todo su esplendor. | D.R.H.

Los reyes del mambo en cuanto a móviles carísimos y buenísimos son Apple y Samsung, y lo cierto es que hacía mucho que no analizaba ninguno de ellos; desde entonces los precios han subido aún más y lo que nos parecían unos exagerados 600 euros ahora son unos aún más exagerados 1000. La duda que tenemos todos es si realmente lo valen.

Los Galaxy S son vistos, yo creo que universalmente, como los iPhone de Android. Cumplen todos los años con un buen diseño, gran rendimiento general y una cámara, o cámaras, que están entre las mejores del mercado. Este año no va a ser distinto. El diseño es, de todo ello, quizá lo menos importante, porque cada vez es más frecuente que no sea algo exclusivo de la gama alta y de hecho el A51 que probamos hace unas semanas es muy similar a este S20. Un sándwich de rebanadas de cristal con un relleno de chasis de aluminio, una pantalla que ocupa aún más espacio dejando unos marcos aún más finos y unos bordes en los laterales que en esta ocasión no curvan tanto la pantalla, quizá debido a las críticas de que pese a quedar muy bonitos no son muy prácticos cuando estás usando el teléfono. El dispositivo que me ha prestado Samsung es gris, pero también lo tienen en negro, azul claro y rosa. En definitiva, nada demasiado innovador ni arriesgado, pero tampoco es algo que te va a ofrecer esta gama, que prefiere jugar a lo seguro dado su estatus de teléfono premium de Android que los demás deben batir.

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Diseño acertado y poco arriesgado. | D.R.H.

Lo que sí sorprende es que hayan logrado mantener el peso en 161 gramos, lo cual se agradece enormemente al usarlo. Toda la parte trasera está vacía excepto el módulo de las cámaras, un módulo que sobresale mucho y que al estar colocado en una esquina provoca que el teléfono se mueva si lo tienes en la mesa, algo que un cierto sector de usuarios sin duda encontrará irritante. Por primera vez, nos deja sin conector de auriculares, aunque la caja incluye unos para USB-C maqueados por AKG que están algo por encima de la media de los que suelen traer los teléfonos. Como corresponde a la gama, cuenta con carga inalámbrica y resistencia al agua. Un detalle que me ha gustado es que el lector de huellas está algo más arriba de lo normal, en una posición diría que más natural donde colocar el dedo. Es quizá el más rápido que he probado, pero aún así me sigue pareciendo lento en comparación con los traseros. Pero a partir de cierto rango de precios ya no hay alternativa y es cierto que colabora a que el diseño sea más minimalista, aunque no deja de ser un poco triste que para desbloquear más rápido tu teléfono debas ir a una gama más baja.

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Sin conector de auriculares. | D.R.H.

La pantalla, la gran novedad

Pero lo mejor sin duda al usar este S20 es la pantalla, que crece levemente hasta las 6,2 pulgadas, pero se logra mantener en unas dimensiones muy cómodas para usar con una sola mano. Esto lo consigue no sólo ocupando un mayor porcentaje del frontal, con marcos extremadamente estrechos, sino también con una relación de aspecto de 20:9, lo cual dejará unas pequeñas bandas a los lados al ver series y vídeos, pero a cambio unas menores bandas horizontales al ver películas. Al margen de esto, la pantalla es espectacular. No sólo de color y brillo, sino también porque puedes optar por una tasa de refresco de 120Hz, es decir, que en lugar de actualizarse la imagen 60 veces por segundo como sucede con cualquier móvil normal, lo hace el doble de rápido. ¿Y realmente eso se nota en algo? Pues si os soy sincero yo era un poco escéptico hasta que lo he probado. Te das cuenta sobre todo al hacer scroll, que puedes apreciar y hasta leer cosas porque a esa velocidad es realmente nítido el movimiento. Las animaciones también mejoran. No es compatible con la máxima resolución de la pantalla, pero merece la pena renunciar a unos cuantos píxeles por esto.

Quizá el único punto en contra es que en los juegos no se nota demasiado. ¿Y por qué? Porque, aunque a primera vista las características son de móvil de gama alta de 2020, con 12 gigas de RAM, 128 de almacenamiento ampliables con microSD de hasta 1 terabyte y soporte 5G, su Exynos 990, aunque excelente en el rendimiento general, no da la talla en rendimiento gráfico frente al Snapdragon 865 que incluye este mismo móvil en su versión norteamericana, sobre todo tras un uso prolongado. De modo que sí, los juegos van bien, pero no tanto como para llegar a los 120 fotogramas por segundo que harían falta para que se notase de verdad.

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El Exynos 990 no permite jugar a pleno rendimiento mucho tiempo en plenitud. | D.R.H.

La batería es de 4000 miliamperios, gracias a lo cual podemos permitirnos esa pantalla a 120Hz y llegar con cierta comodidad a final del día, a no ser que lo exprimamos mucho. En ese caso, siempre tenemos la alternativa de volver a ponerlo a 60Hz y ganar aproximadamente un 30% de autonomía, que es lo que yo haría si, por ejemplo, me lo llevara de viaje turístico para sacar fotos, si es que alguna vez nos vuelven a dejar salir de casa, además de activar el modo oscuro, que ahorra mucha energía.

Fotografía

Y hablando de sacar fotos, ¿cómo son las cámaras de este cacharro? Pues de primera línea. Una ventaja que tiene sobre los Pixel son sus sensores a pesar de que, al estar en España, al igual que el Exynos nos toca el terminal con sensores de Samsung y no de Sony. El principal, de 12 megapíxeles, apertura f/1.8 y estabilización óptica, ha aumentado respecto al S10 el tamaño de cada píxel de 1,4 a 1,8 micrones, lo que le permite captar muy bien las fotografías y hasta los vídeos con poca luz aun sin recurrir al modo nocturno. Un modo nocturno que, de todos modos, está a gran altura, como pueden ver en comparación con el Pixel 3A:

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Comparativa en foto nocturna del Samsung S20 y el Pixel 3A con y sin modo nocturno activado. | D.R.H.

Algo similar ocurre con el gran angular, de misma resolución y peor apertura f/2.2 y que ha aumentado de 1 a 1,4 micrones, además de no presentar demasiada distorsión de tipo ojo de pez en los bordes, que siempre es un problema. Mención aparte merece el telefoto, que también cuenta con estabilizador y sube hasta los 64 megapíxeles para alcanzar un zoom digital de 30 aumentos que naturalmente queda algo borroso:

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De la foto normal al zoom de 30 aumentos. | D.R.H.

En cuanto a vídeo, aunque es capaz de grabar a 8K con el sensor del zoom, lo cual como logro técnico ya es bastante impresionante de por sí, resulta poco práctico; lo cierto es que a resoluciones más normales los resultados son excelentes, con una buena estabilización y gran calidad de imagen, aunque no haya podido probarlo como se merece:

En definitiva, por resultados globales, si tuviera que elegir exclusivamente por la cámara entre mi Pixel 3a y este S20, elegiría el Samsung, lo cual, teniendo en cuenta que me compré el móvil de Google exclusivamente por su cámara no es un elogio menor.

Conclusiones

El teléfono tiene otras cosas que destacar. El 5G es algo que ahora no sirve de mucho, pero que si nos compramos este móvil con intención de que nos dure unos años seguro que podremos sacarle partido antes del final de su vida útil. Y en caso de que no estemos convencidos, podemos renunciar a esa conexión y ahorrarnos 100 euros. El sonido es estéreo, pero tampoco es la octava maravilla. Por otro lado, me alegra indicar que la capa de personalización OneUI 2.1 no presenta los problemas que tenía en el A51 cuando lo probé y funciona como la seda, algo que se deja notar especialmente a 120Hz.

El problema del Galaxy S20, como todos sabéis, es el precio. Este móvil cuesta 1.000 euros, y si renuncias al 5G se queda en 900. Es mucho dinero por un móvil. Sin duda, los Samsung S son productos de calidad, pero no creo que ofrezca tanto como para que merezca la pena la diferencia de precio con, sin ir más lejos, el propio S10, que ahora mismo ya está a 650 euros. Pero, por supuesto, si estás dispuesto a desembolsar esta cantidad, es mucho mejor hacerlo en el S20 que en el Pixel 4, pongamos por caso.

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