La Batalla del Ebro será recordada en un museo de próxima creación

Los parajes en los que se desarrolló la Batalla del Ebro pretenden convertirse en un Museo sobre la contienda, una de las más duras de la Guerra Civil española. Dos de los ayuntamientos de la zona, Corbera de Ebro y Gandesa, y el presidente del Consejo Comarcal de la Terra Alta, en Tarragona, son los impulsores del Consorcio para la Musealización de la Batalla del Ebro, un organismo cuyo objetivo será llevar a cabo el proyecto de recuperar el pasado histórico de la zona.

Los estatutos del consorcio, que están siendo ultimados, deberán ser aprobados más tarde por los consistorios, que además tienen previsto invitar a otros doce ayuntamientos a que se sumen a la iniciativa. También pretenden que los escenarios más emblemáticos de la batalla, como el puesto de mando del General Franco, las trincheras de la Serra de Pándols o el pueblo de Corbera sean catalogados como lugares de interés. El Museo de la Batalla del Ebro tendría su sede en Corbera, y contaría con la ayuda económica de la Generalidad catalana. Estaría en marcha a partir de finales del verano de 2001, y entre sus finalidades, tendría la de recordar a los jóvenes los males de la guerra.

El Museo albergaría todo el material disponible sobre la batalla: cartillas militares, cartas, partes de guerra, escritos sobre la actuación de los brigadistas, planos de estrategias, o partes médicos de los heridos atendidos en los hospitales de campaña. Junto a ellos, se expondría material bélico: bombas, granadas, fusiles, y todos los objetos que hoy todavía siguen encontrándose en la zona. También se pretende musealizar el Pueblo Viejo de Corbera, destruido durante la batalla por los bombarderos, y que permanece intacto como monumento vivo al recuerdo de las atrocidades de la guerra.