Menú

Por qué la trilogía Cornetto es importante (y por qué tendrías que haberla visto)

Sony reedita la reciente trilogía Cornetto, tres filmes que descubrieron un talento y repasaron en clave de humor nuestros géneros favoritos.

Sony reedita la reciente trilogía Cornetto, tres filmes que descubrieron un talento y repasaron en clave de humor nuestros géneros favoritos.
Nick Frost y Simon Pegg | Sony Pictures

Se reedita en España, en formato Blu-Ray, la célebre trilogía Cornetto del británico Edgar Wright, uno de los jóvenes realizadores de género más rebeldes y talentosos del cine de género... tan rebelde y talentoso que Wright es de esos a quienes, en el fondo, los estudios temen encomendarles un gran proyecto industrial pese a sus sobradas actitudes con la cámara y la máquina de escribir (por no mencionar su conocimiento enciclopédico de la cultura pop). Los aficionados todavía recuerdan cómo el británico fue desalojado de Ant-Man, una gran producción Marvel, justo en vísperas de su rodaje, y cómo su nombre se ha vinculado a multitud de proyectos de Hollywood sin que la sangre llegase al río.
De todas formas, no lloren por Wright, que sigue coqueteando con los grandes estudios y por eso está a punto de estrenar Baby Driver, me atrevo a aventurar uno de los pocos filmes verdaderamente interesantes de la temporada veraniega.

Quienes no conozcan su particular repaso de los tres grandes puntales del cine de género que supone la trilogía Cornetto están de enhorabuena, porque pueden hacerlo ahora por primera vez y en condiciones bastante favorables. Sony Pictures Entertainment España, que desde hace unos meses se encarga de la distribución de Universal, Paramount y la propia Sony y advenedizas, reedita en alta definición (y al menos en dos de los casos, por primera vez en Blu-Ray) Zombies Party, Arma Fatal (de la cual se cumple su décimo aniversario) y Bienvenidos al fin del mundo, los tres repasitos que Wright ha realizado a, respectivamente, los géneros de terror, acción y ciencia ficción. Nuestros tres sabores favoritos, vaya.

Esta vez con multitud de los extras inéditos que se quedaron en el tintero en las anteriores ediciones en DVD (y de un solo disco) de Universal para Zombies Party (mediocre título español para Shaun of the dead) y Arma Fatal (Lo mismo para Hot Fuzz). En ambos casos con horas y horas de audiocomentarios (sin subtitular al castellano, sí al inglés), tomas falsas y documentales filmados para la ocasión por el propio equipo creativo, conformado por el propio Wright, sus actores fetiche Simon Pegg y Nick Frost, y el guionista Joe Cornish. Una bicoca.

hot-fuzz.jpg
Pegg y Frost en Arma Fatal | Archivo

Los responsables de la serie de culto británica Spaced, todavía inédita en España, han facturado una trilogía notable. Zombies Party, la primera y -en opinión de quien esto escribe- la mejor de ellas, es un evidente homenaje al zombi de George A. Romero pero también a cualquier película de fantaterror que a ustedes se les ocurra, tal es el conocimiento de Wright del género (una de las opciones para visionar el largometraje cataloga todas y cada una de las referencias culturales de la película). Pero también es una formidable comedia británica, de esas con un guión de hierro capaz de resistir cualquier tipo de análisis y unos buenos diálogos que no solo adornan la acción, sino que la justifican.

Porque el guión, no solo el ya famoso estilo visual de Wright, es lo que sustenta la trilogía Cornetto. Zombies Party es, como reza su frase publicitaria, una "comedia romántica con zombies"; Arma Fatal una parodia de las buddy-movies de acción americanas, y Bienvenidos al fin del mundo una revisión de la ciencia ficción de serie B de los 50 y 80. Pero en todas ellas planea, convenientemente adaptada, una misma idea, un concepto que justifica la historia y su referencialidad, y que no es otra que la particular visión de Wright, Pegg y compañía de la comedia "peterpanesca" tan en boga en la última década.

Todos los protagonistas de la trilogía Cornetto hacen frente a sus propios demonios, y estos son de los más comunes: el tiempo pasa y el eterno niño devenido en adulto accidental se resiste a madurar para no enfrentarse a lo que, no lo dudemos, se trata de un mundo evidentemente hostil. Wright sabe decir a su público "espabila, friqui", pero lo hace perdiendo adecuadamente la compostura, sin disminuir los watios de diversión, conociendo perfectamente el área que toca y facturando películas que representan dignamente el género que parodian sin mostrarse paternalistas. No puede ser casualidad que el pub, entendido como escondite definitivo -ya sea el Winchester de Zombies Party o el Fin del Mundo de Bienvenidos al idem- sea en ambos casos ese refugio mágico que puede acabar representando tanto una trampa mortal como la salvación para sus protagonistas. Wright apuesta siempre -referencia a Zombies Party- madurar pero guardando algún que otro secreto en nuestro cobertizo.

worlds-end.jpeg
Simon Pegg en Bienvenidos al fin del mundo | Archivo

Cornetto -llamada así por la anecdótica presencia de un Cornetto en todas ellas- es un repaso en clave cómica de nuestros tres géneros favoritos filmada a ritmo de barrido y zoom, donde Wright se revela un absoluto maestro a la hora de 1) generar comedia y 2) contar la historia, a través de la pura y dura imagen. También que se trata de un paciente narrador, capaz de, en Zombies Party, ir acercando el terror poco a poco con zombies que se arrastran (nota del autor: los mejores) y tomarse el tiempo necesario para plantear el conflicto, el verdadero conflicto, que aborda el largometraje.

Lo mismo pasa con Arma Fatal, de cuyos extras le recomendamos el documental con Wright, Frost, Pegg y Cornish recorriendo el mundo promocionando el filme, y demostrando que la química en pantalla solo puede nacer de la amistad. Un cóctel de Dos Policías Rebeldes con Agatha Christie que, por tanto, esconde tanto un misterio como paródicas escenas de acción, por no citar una serie de asesinatos que dan sopas con ondas a muchos filmes de terror contemporáneo. La tercera y última de las entregas, Bienvenidos al fin del mundo, es la pequeña gran abandonada del grupo, pero aún así nos reserva un documental de cuarenta minutos perfectamente subtitulado, sin duda suficiente para saciar el hambre por el último capítulo de la trilogía.

Una serie en la que Wright demuestra que se crece con la histeria. Un autor pop perfecto que acabará configurando una carrera análoga, aunque desde el humor, a paisanos suyos del cine de género perfectamente conocidos por ustedes sin han leído estas líneas. Perfectamente integrado en la narrativa actual, si Wright no se ha encargado de un blockbuster no es porque no sepa, sino porque no le conviene. Nosotros sabemos que su territorio es el de películas como esta trilogía Cornetto que tantos fans admiramos.

Temas

En Cultura

    0
    comentarios