Son actores de esos a los que la prensa llama "de raza", ganadores ya de "todos los premios habidos y por haber" que se conceden en España. Son los hermanos Julia y Emilio Gutiérrez Caba, que pronto recogerán el Feroz de Honor.
Julia (Madrid, 1932) y Emilio (Valladolid, 1942), que recibirán el máximo galardón de la Asociación de Informadores Cinematográficos de España (AICE) el próximo día 16 de enero, mantuvieron un encuentro con periodistas en la Sala Alcalá 31. La reunión cinéfila fue conducida por el periodista y crítico de cine de esRadio Andrés Arconada, miembro del Comité Organizador de los Premios Feroz 2020, quien considera este un premio "muy merecido", y no solo porque "Emilio cuenta con más de 80 películas y Julia, 50", según recoge Efe. "Son personas reconocidas y respetadas por todas las generaciones, algo muy difícil de encontrar", añadió.
"Dos personas humildes, que aman un trabajo que les sigue apasionando y que saben reírse de sí mismos", aseguró Arconada, tras valorar que esta es una característica imprescindible para aceptar este Feroz, un premio con la seña de identidad de quienes juzgan e informan al público sobre sus trabajos, sin otro interés añadido.
Muestra de ello es el primer recuerdo de los premios que les vino a la cabeza al ser preguntados por ello: "Lo que pesan", dijeron a coro ambos artistas, Emilio acordándose de la réplica de una puerta de hierro sobre una base de mármol que le dieron en un pueblo, que casi no pudo sujetar, y Julia, que los deja a un lado en cuanto se los dan.
La escena, una tradición familiar
Hijos de los actores Emilio Gutiérrez e Irene Caba Alba, sobrinos de la actriz Julia Caba Alba, nietos de la actriz Irene Alba, sobrinos-nietos de Leocadia Alba y bisnietos del actor Pascual Alba, Emilio y Julia continuaron la tradición familiar en la escena, junto a su hermana Irene, abuela a su vez de la continuadora de la saga Irene Escolar.
Estas dos personas "que tienen todos los premios habidos y por haber" de cine, teatro y televisión, destacó Arconada, llevan en activo más de cincuenta años. Emilio comenzó como técnico de laboratorio y debutó con una difícil película titulada La llamada (1965), que "pasó la censura" no sabe ni cómo.
Al año siguiente hizo Nueve cartas a Berta y La caza, cine "comprometido y de autor" después de lo cual se tuvo que dedicar a la tele para sobrevivir, y a rodar cine comercial: Como dos gotas de agua, con Pili y Mili, es uno de esos ejemplos, recuerdó el actor.
"No reniego de esos trabajos porque me enseñaron oficio", dice, aunque reconoció que su aspecto y "que no era galán" le dejaban siempre atado a papeles de "buen chico de pueblo, o de estudioso".
"Por eso -añadió- he hecho tanto y tan diverso". De hecho, Emilio es uno de los poquísimos actores que reflejan en la web especializada IMDB más de doscientas interpretaciones: en concreto, 213, tres de las cuales aún están pendientes de estreno en cine y tele.
A Julia, por el contrario, no le apetecía demasiado el cine, pero la llamó Juan Antonio Bardem y, después de un ataque de ego -le dijo que ella no hacía pruebas, que fuera a verla al teatro- se hicieron muy amigos y rodaron varias películas juntos, entre ellas, su favorita, Nunca pasa nada (1963).
"Siempre he priorizado teatro a cine, mientras mi hermano lo hacía todo, pero yo no daba mas de mí", apuntó Julia, mientras Emilio reconoció las locuras que ha hecho: ensayos, rodajes y tele, uno detrás de otro, sin parar.
"Vamos a premiar a una saga de actores que data de más de 150 años, sus bisabuelos, su padres, ellos e Irene, y la continuación de Irene Escolar. Son una saga más fructífera de España, sin olvidar a Julia Caba Alba", concluyó Arconada.