Menú

La muerte de Manuel Lorenzo, el entrañable abuelo de 'La saga de los Porretas'

Entre 1976 y 1988 Manuel Lorenzo ejerció de abuelo en La saga de los Porretas.

Entre 1976 y 1988 Manuel Lorenzo ejerció de abuelo en La saga de los Porretas.
Manuel Lorenzo, a la derecha | Archivo

Con el fallecimiento del actor Manuel Lorenzo se nos va un entrañable actor que se hizo popular con una de las últimas series radiofónicas seguida por millones de oyentes: La saga de los Porretas, donde con su voz grave y un acento castizo nos alegraba las mañanas, apenas diez minutos, en su papel del abuelo Segismundo. Eso hizo durante doce años, entre 1976 y 1988, aunque su biografía artística también contiene apariciones felices en películas de José Luís Garci. Fuera de los micrófonos era un hombre sencillo, agradable, bienhumorado que viajaba en autobús donde lo reconocían muchos pasajeros. Él siempre les dedicaba una sonrisa cómplice. Nada que ver con su personaje de ficción, tantas veces cabreado.

Los guiones de La saga de los Porretas estaban escritos por un experto en el género, Eduardo Vázquez. Retrataban a una familia de clase media española, trabajadora. La situaban en un pueblo de ficción, Pinares del Vencejo, que luego acabó llamándose Pinares de don Honorio". Y a diario, de lunes a viernes, se transmitían las peripecias familiares del abuelo, en cuya casa vivían los hijos y los nietos. Por muy exageradas que fueran esas situaciones, sobre todo por parte del abuelo, cuanto allí sucedía estaba tamizado por un humor con el que se identificaban miles y miles de radioyentes. La serie se llevó luego al cine. Hubo más de un partido político que sugirió al guionista incluirlos, dada la popularidad del programa. Pero no accedió a la petición. Y cuando finalizó, en las oficinas de la cadena Ser recibieron muchas cartas solicitando que La saga de los Porretas continuara. Se dio la circunstancia de que María Dolores Pradera fue una de esas peticionarias. Lamentaba la desaparición de la serie. Otra anécdota, desde luego con otro color ocurrió con Radio Barcelona, perteneciente a la misma cadena radiofónica: sus directivos consideraron que La saga de los Porretas era "muy madrileña", de ahí que la excluyeran de su programación. Eso, cuarenta y cinco años antes de que en Cataluña siguieran con la tabarra del procés y la autodeterminación. ¡Qué estupidez, por no decir otra cosa más gorda!

Manuel Lorenzo era el eje sobre el que se desarrollaban los guiones, junto a las figuras del cuadro de actores de Radio Madrid, caso de Matilde Vilariño y Juana Ginzo. Qué burla del destino, pues en algo más de una semana han muerto los tres citados. Nuestro recordado abuelo Segismundo, o sea Manuel Lorenzo, había nacido en los Madriles el 4 de noviembre de 1931. En 1947 accedió al cuadro de actores de Radio Madrid, gracias a una gestión de Luís Sánchez Polack, Tip. Y allí continuó con su carraspeo vocal en muchos programas dramáticos o sainetescos. Participó en el espacio deportivo que dirigía el también añorado Vicente Marco, donde se lucía asimismo José María García. Manuel Lorenzo llegó a ser el locutor oficial de una Vuelta Ciclista a España, donde hizo gala de sus conocimientos adobándolos con amenos comentarios. En el cine sus más felices papeles se los proporcionó José Luís Garci en Asignatura aprobada y sobre todo El Crack 1 y 2, donde en el personaje de Rocky el barbero le contaba al detective Areta, que encarnaba Alfredo Landa, toda suerte de legendarios combates de boxeo, dándole a entender que él había estado allí, casi tocando las doce cuerdas, en el Madison Square Garden. Landa, le seguía la corriente, claro.

Contaba su hijo, el periodista Javier Lorenzo, que cuando dejó de actuar en la cadena Ser, puso su voz al servicio de cortometrajes y documentales. Con esa voz entrañable, que acaba de silenciarse para siempre.

En Cultura

    0
    comentarios