Menú
Bután, un pequeño país asiático, celebró en 2006 unos comicios electorales por primera vez en su historia. Las autoridades tuvieron que hacer hasta un simulacro.

'El monje y el rifle', el pueblo que necesitó un simulacro electoral

Bután, un pequeño país asiático, celebró en 2006 unos comicios electorales por primera vez en su historia. Las autoridades tuvieron que hacer hasta un simulacro.

En 2006 el Rey de Bután, Jigme Singye Wangchuck, decidió abdicar de sus poderes absolutos y abrir el país a la modernización y la democratización. De esta forma, estableció que se celebrasen unas elecciones. El problema era que había un pueblo que no sabía ni siquiera lo que era la palabra elecciones, un pueblo al que le estaban llegando los primeros televisores que suponían una ventana al mundo.

Así arranca El monje y el rifle, película que este fin de semana llega a los cines de toda España. Se trata de una comedia fresca e inteligente que satiriza sobre los procesos electorales, ¿cómo se lo explicas a una persona que nunca ha vivido uno? Las autoridades de este pequeño país al sur de Asia, en plena cordillera del Himalaya entre China e India, que no llega ni a los 800.000 habitantes, se encontraron con un problema inicial: la población no estaba ni siquiera censada.

En un país con la población anclada casi en el medievo, donde muchos de sus ciudadanos no saben ni siquiera la fecha en la que nacieron, sólo el signo del horóscopo chino que tienen, la tarea resultaba especialmente difícil. Todas estas situaciones las recoge a la perfección El monje y el rifle con un humor muy diferente del que estamos acostumbrados.

el-monje-rifle.jpg

El monje y el rifle está dirigida por Pawo Choyning Dorji, el director butanés que puso a su país en el mapa cinematográfico al conseguir la primera nominación en los Premios Oscar para una película de Bután con Lunana, un yak en la escuela. Un país en el que la industria del cine es casi inexistente y apenas se hacen películas, de ahí el gran hito que supuso.

El título de la película, El monje y el rifle, se debe a lo que sucede en la primera escena de la misma: un viejo lama escucha la radio en su templo cuando se entera de que va a haber elecciones. Esto hace que llame al monje budista que le sirve para encargarle que le consiga dos rifles para la noche electoral, debe prepararse para lo que viene y "volver a poner orden".

Entretanto, las autoridades organizan un simulacro electoral con tres partidos ficticios en un pueblo que sólo ve inconvenientes a las novedades que le plantean. Y por si fuera poco, un coleccionista norteamericano anda buscando un antiguo rifle para su colección. Situaciones surrealistas, inocencia en abundancia y diálogos sencillos pero efectivos hacen de Un monje y el rifle una buena opción para ver en las salas de cine.

Temas

0
comentarios