Un misterio, una chica que fue encontrada atropellada y muerta en un árbol, y un inspector de Policía que no acepta la versión oficial. La misma que dice que la joven iba montando en bici cuando un coche que venía de frente la atropelló y al salir disparada su cuerpo terminó en las ramas de un árbol. Un inspector que tanto se obsesionó con este caso cerrado en falso que el día de su jubilación, rodeado de sus compañeros en la comisaría, se voló los sesos con su pistola reglamentaria.
Así arranca Sin Límites (Los casos del departamento Q), que esta semana estrena Movistar Plus+. La película es la sexta entrega de la saga Los casos del departamento Q que adaptan al cine las exitosas novelas negras de Jussi Adler-Olsen. Nadie como los nórdicos para la novela negra, ahí tenemos ejemplos como los libros de Henning Mankell y su inspector Kurt Wallander. Para los que no hayan visto las películas anteriores de esta saga, tranquilos, pueden ver Sin Límites sin ningún tipo de problema ya que las historias son conclusivas. Para los que tengan interés, los títulos anteriores son: Misericordia, Profanación, Redención, Expediente 64 y El Efecto Marcus.
En esta película danesa nos encontramos al detective Carl Mørck (Ulrich Thomsen) y su departamento de casos sin resolver que tendrá que volver a sus orígenes, a la isla de la que un día salió sin mirar atrás. Intentando resolver este misterio, se encontrará con seres de su pasado que en ocasiones parecen auténticos espectros fantasmales. La fallecida es Alberte, una joven cuyo asesinato fue cerrado en falso como accidente de tráfico y que terminó provocando el suicidio de Haabersat, viejo amigo y colega de Carl Mørck desde sus años en la academia de policía.
A partir de ese momento, Mørck junto a sus compañeros Rose (Sofie Torp) y Assad (Afshin Firouzi) se verán inmersos en una inquietante investigación en la isla de Bornholm en la que saldrán a la luz viejas disputas, un misterioso culto al sol por parte de una secta y fetichistas de la muerte de la dark web.
Violencia, sangre, sectas y ritos y sobre todo personajes inescrutables son marca de la casa de las ficciones negras nórdicas. Una buena opción para ver en casa ya que esta sexta entrega no se estrena en cines, seguramente porque ha perdido un poco de originalidad con giros de guion un tanto imposibles.