Las salas de cine españolas sufren cada fin de semana una invasión de cine francés, en su mayoría muy malo que el público no va a ver. Por eso cuando llega una buena película, como Prodigiosas, hay que recomendarla vivamente ya que de lo contrario el público pensará que es una más del montón, del montón de películas malas francesas.
Prodigiosas es una historia de superación basada en hechos reales que nos cuenta la historia de las gemelas Vallois, virtuosas pianistas con un gran talento. Por el empeño de su padre, ingresan en la prestigiosa Escuela Superior de Música de Karlsruhe bajo la tutela de Klaus Lenhardt. Sin embargo, allí son unas más. A las duras clases hay que sumarle la carga emocional de no querer defraudar a su padre, que está viviendo su particular sueño a través de ellas tras haberlo sacrificado todo para que sus hijas pudieran triunfar.
Sin embargo, su ascenso se ve amenazado cuando una enfermedad rara afecta las manos de una de ellas. Pronto, la otra sufre el mismo destino. Negadas a renunciar a su pasión, crean una técnica única que desafía los límites del piano, demostrando que el verdadero talento no conoce barreras.