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'La Sombra Prohibida': Lovecraft, tentáculos y cine español sin subvención (II)

La Sombra Prohibida es la continuación directa, que no secuela, de La Herencia Valdemar, cinta fantástica presentada hace exactamente un año como una única película dividida en dos partes con la esperanza de, primero, recuperar un cine fantástico ausente desde hace tiempo en nuestra cinematografía; y segundo y no menos importante, proponer un nuevo modelo de cine de género auto subvencionado y alejado de los parámetros de producción impuestos por la débil industria del cine de nuestro país.

La Sombra Prohibida comienza justo donde acabó La Herencia Valdemar, con la promesa de juntar los destinos de varios personajes de diferentes épocas en una trama de terrores cósmicos inspirados en la literatura y los mitos Lovecraftianos. El resultado es una cinta donde la fantasía y el misterio priman sobre el terror, y que pese a resultar herida por la decisión de partir la historia en dos mitades, reserva un buen número de sorpresas que agradarán a los fanáticos del género.

Tanto la primera como ahora La Sombra Prohibida están aquejadas por ello de un exceso de escenas de relleno y, sobre todo, de una confusa e innecesaria recurrencia al flashback que aquí deriva en un inicio demasiado confuso. Hay demasiadas líneas argumentales que perjudican la unidad del relato, pero en cuanto éste coge velocidad, se convierte sin rubores en aquello que es: una honesta, simpática y hasta lograda serie B y un emocionado y verdadero poema al cine de terror y fantasía de raíz clásica, alejada de vicios, modas y subgéneros actuales.

La película, dentro de esos parámetros, presenta logros capaces de provocar la excitación. Hay actores que se creen la propuesta; la banda sonora de Arnau Bataller vuelve a sonar profunda y magnífica, la ambientación es suficiente y el uso graduado de unos efectos especiales extremadamente conseguidos confirman a Alemán como un director que sabe jugar bien sus cartas, o al menos, hacerlo con honestidad y sin presumir de pastiche. Las dos películas demuestran que es capaz de mantener un pulso consigo mismo, la crítica y hasta con el público al proponer una película de terror de sabor añejo y tradicional. Hace poco comentábamos que la muerte de Juan Piquer Simón, director de cintas como Slugs o La Grieta, fue probablemente más lamentada en ciertos círculos cinéfilos fuera de nuestro país que dentro. No deberíamos permitir que el presente díptico cayera en el olvido de la misma manera.

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comentarios
1 clavius, día

Hola Juanma. La verdad es que Lovecraft es muy difícil de trasladar al cine. Personalmente lo encuentro aburrido y pesado, pero no sé por qué lo releo con cierta asiduidad. Recuerdo una historia sobre un brujo, era una de las largas, que me gustó bastante, creo que andaba el Necronomicón por medio, hace mucho tiempo que la leí y en la selección de obras que compré no venía ese relato que en mi opinión si podría dar lugar a una buena película. Poe es mucho más cinematográfico, en él no hay monstruos del espacio exterior, en él los monstruos somos nosotros, los reales, los que nos sentimos atraídos por lo insano, por lo malvado, por lo turbio...Corman hizo un montón de estupendas películas basadas en su obra, con el grandioso Vincent Price, el enorme Peter Lorre, Boris Karloff también andaba por alli...en una de ellas salían los tres juntos, con ese tono de comedia que le imprimía Corman a esas magníficas historias...todos eran brujos, el pequeño Lorre aparecía como un borrachín de ojos vidriosos...¡qué buena, coño! ¡qué buena!. Adoro aquel cine de terror, así como el de la Hammer de los 60 o 70, grandes actores, tipos profesionales dirigiéndolo todo, actrices sexys, pechugonas, excelentes guiones basados en maravillosos cuentos...en fin: http://elblogdekufisto.blogspot.com/2010/10/miralamiel.html Saludos Juanma.

2 KaT, día

clavius, ¿tal vez el relato al que te refieres sea "el horror de dunwich"?

3 alterego, día

Son curiosas estas películas españolas sobre el mundo de Lovecraft, al igual que Dagón, me recuerdan a las partidas de role que jugaba a finales de los 80.

4 clavius, día

Gracias Kat. Esa es. Un saludo

5 accj1303, día

Pues a mi me gusta leer a Lovecraft. No he visto apenas películas basadas directamente en sus obras ni me apetece. Me gusta leerlas y verlas... pues no sé. A la gente que le aburre Lovecraft y le gusta la literatura fantástica de este tipo (que a lo mejor esa es la razón de que le aburra Lovecraft, que debería leer otro género) le recomiendo un libro de Alianza, yo lo compré a principios de los 80, titulado "Los mitos de Cthultu" (cito de memoria). Una joya, son varios autores, entre ellos Lord Dunsany, etc. Con relatos magníficos. Hay que leerlo. Un saludo Nota: Lo compré junto con el disco de Stevie Wonder "The secret World of Plants" ( o algo así), un disco prescindible, pero que cuando pienso en el libro, escucho mentalmente el disco y necesito ponerlo. Es como una compulsión y una especie de retroalimentación disco y libro, van juntos. Curioso ¿no?

6 Juanmagh, día

Veo que saben ustedes del tema. Por cierto, me gustaría ver cosas de la Hammer pronto. Por dónde me recomiendan empezar?