El 25 noviembre de 1970 se suicidó uno de los escritores japoneses más reconocidos del mundo, Yukio Mishima, autor de 257 obras, la más famosa, su autobiografía titulada Confesiones de una máscara.
El escritor tenía 55 años cuando decidió quitarse la vida haciéndose el "harakiri", como hacían sus antepasados. En el cuartel militar de Tokyo, en presencia de 4 soldados, Yukio Mishima se clavó su daga en el estómago para que, posteriormente, le cortara la cabeza una persona de confianza.
Muerte dolorosa
Este método de suicidio no se llevaba a cabo desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. Este ancestral ritual de los samuráis lleva a una muerte dolorosa que culmina con la decapitación de alguien cercano.
Yukio Mishima lideró a un comando de jóvenes patriotas en un intento de dar un golpe militar, que devolviera a Japón al mundo tradicional de los emperadores y samuráis. Como respuesta solo recibió burlas y humillación por parte de los soldados. Por ello, el escritor decidió quitarse la vida con honor, como habían hecho hace siglos sus antepasados samuráis.
Dificultades familiares
Su vida estuvo llena de contradicciones y estuvo influenciada por sus antepasados samuráis. Desde una edad temprana, enfrentó dificultades con su familia: a los 12 años comenzó a escribir, una pasión que lo acompañaría a lo largo de su vida. Su padre, por otro lado, era una persona reacia a ello, rompiendo todo lo que escribía su hijo.
A pesar de ello, continuó escribiendo a escondidas todas las noches y logró ser en tres ocasiones nominado al Premio Nobel de Literatura. Aunque se casó y tuvo hijos, vivió su vida como un hombre homosexual.
Su complejo por su baja estatura lo llevó a interesarse por el culturismo. Era un hombre de gran vitalidad que seguía anclado en los valores tradicionales, no conseguía quitarse de la cabeza el pasado glorioso de Japón. Su muerte dio origen al mito y su entierro fue un gran acontecimiento en el país. Miles de japoneses despidieron al Hemingway japonés.
El último Samurái
Isidro Juan Palacios, escritor y autor del libro "Yukio Mishima, vida y muerte del último samurái, publicado en 2020 con motivo del 50 aniversario de la muerte del escritor japonés, estuvo En Casa de Herrero en esRadio.
El autor asegura que la clave de su vida y de su suicido reside en el día en que fue convocado para incorporarse al ejército japonés. "En la Segunda Guerra Mundial no había incorporaciones para regresar, se iba a la guerra a morir, era una invitación a morir en combate", detalla el escritor.
En una revisión médica le diagnosticaron una enfermedad. No se trataba de un catarro, sino de tuberculosis. Por ello, según Palacios, no era acto para el servicio y le liberaron.
Por lo tanto, Yukio Mishima quedaba libre de ir a morir en el frente. Isidro Juan Palacios explica que el japonés pensó que estaba huyendo de la muerte: "Es difícil de comprender para alguien que lleva un samurái por dentro, cuando su profesión es la muerte", concluye el escritor.