Una antigua costumbre social –la de visitar a los enfermos– se convierte, en esta nueva novela de Vicente Valero, en el pretexto único para la creación de un mosaico de historias y retratos. El narrador vuelve a los años de la infancia y a su isla natal para indagar en el estado de una sociedad que está a punto de asistir a la muerte de Franco y el comienzo de la Transición.
Vicente Valero (Ibiza, 1963) es escritor y poeta, Premio Loewe. También es ensayista y narrador, autor de Las transiciones.
Enfermos antiguos (Periférica) es una novela corta "de aprendizaje", de ambiente histórico y, en cierto sentido, autobiográfica. No es una novela realista al estilo decimonónico, sino poética. A través de las visitas a los enfermos, el chico protagonista se va haciendo adulto. A la vez, supone una crónica histórica de una sociedad en momentos de grandes cambios. "La guerra CASI había terminado" (pág. 47). "Se avecinaban nuevos tiempos" (pág. 57).
El escenario principal Ibiza y la conciencia de estar viviendo en una isla. Por un lado, un paraíso, pero, por otro, un sitio en el que estás encerrado. "¿Dónde podrán ser más felices que aquí?" (pág. 53). Algunos rompen esa frontera, los que vienen, como una familia de exiliados de Toulouse que traen nuevas ideas y nuevas canciones.
La enfermedad aparece como un factor de igualdad social, a todos les toca. También enferman las casas, los libros, las cosas. Es el deterioro que trae el tiempo. Generaliza una enfermedad: "La vejez". Se ven las largas convalecencias de entonces, tiempo suspendido, proustiano; y el respeto al médico (también con vicios ocultos).
En resumen, el autor demuestra que se puede hacer buena literatura sobre un tema pequeño. Es su gran mérito, pero también su principal limitación." ¿Hará alguna vez Valero la gran novela?", se pregunta Amorós. "¿Será capaz de pasar de Amarcord a El gatopardo?"
Vicente Valero. Enfermos antiguos, ed. Periférica, Cáceres, febrero 2020, 144 págs, 15’75 euros. ISBN: 978-84-16291-97-7.