Menú
Manuel Román

El adiós a Gloria Van Aerssen, compositora de Vainica Doble

Estas artistas malditas, que inventaron un estilo diferente, ajeno a las modas del pop, serían fuentes de inspiración de no pocos ídolos de la movida madrileña.

Estas artistas malditas, que inventaron un estilo diferente, ajeno a las modas del pop, serían fuentes de inspiración de no pocos ídolos de la movida madrileña.
Portada del single 'Déjame vivir con alegría' | Gong

Nos acaba de dejar para siempre Gloria van Aerssen, quien con su inseparable amiga Carmen Santonja formara uno de los dúos más originales del pop español de los años 70, Vainica Doble. Resulta chocante que su carrera musical fuera como un Guadiana, irregular, poco apreciada por el público y no del todo comprendida por la crítica. Y justo al final –y sobre todo después de su retirada- estas artistas malditas, que habían inventado un estilo diferente, ajeno a las modas imperantes del pop, serían reivindicadas como innovadoras, en cuyas fuentes de inspiración bebieron no pocos ídolos de la movida madrileña.

Dediquemos hoy nuestro recuerdo a Gloria Eliza van Aerssen Beijeren van Voshol, quien pese a tan complicado nombre resulta que era natural de Dos Hermanas (Sevilla), donde nació el 1 de mayo de 1932. Su padre era un barón de origen holandés, que ejerció de diplomático en nuestro país y en sus horas libres tocaba el violín. Se cuenta que tenía un lejano parentesco con la actriz Audrey Hepburn.

En Madrid, contando diez años, se instaló con su familia, mostrando sus deseos de estudiar Bellas Artes. Hermana del bailarín y coreógrafo Alberto Lorca, al tiempo que practicaba con una guitarra española recibía asimismo clases de ballet. La amistad entre Gloria y Carmen surgió en sus años de adolescencia y se apuntaló ya en las aulas universitarias.

Carmen y Gloria con sus hijos

Con veintitrés años Gloria contrajo matrimonio con el pintor Juan Ignacio Cárdenas. Tendrían cuatro hijos. Es en 1966 cuando Gloria propuso a Carmen formar un dúo musical, partiendo de su mutua admiración por el pop anglosajón, entonces en plena efervescencia. Influenciadas por Los Beatles, Los Rolling Stones, Yes, Génesis, Bob Dylan, se pusieron las pilas para crear sus composiciones.

Si bien Carmen no se limitaba sólo a escribir los textos y se ocupaba asimismo de componer música, Gloria la ayudaba en sus creaciones melódicas y desde luego era quien llevaba la voz cantante, léase quien sobresalía en el dúo con sus recursos vocales. A sus querencias inglesas unían, de forma un tanto ecléctica la pasión flamenca, los cantos litúrgicos y hasta reminiscencias medievales. Componían a piano y a guitarra y luego se las ingeniaban para aportar novedosos arreglos. Ese espíritu experimental dominaría toda su producción discográfica.

Carmen era cuñada del guionista y realizador de televisión (aún no había debutado en el cine) Jaime de Armiñán, lo que les permitió, por ejemplo, componer a ritmo de jazz la cabecera del programa Tiempo y hora, aunque su primera experiencia destacada sería como autoras de la música de la serie Fábulas, donde desarrollaron su vena satírica en las canciones que aportaron, como "La cotorra". Eso sucedía entre 1967 y 1968. Su siguiente paso las llevó a colaborar con el imaginativo y sorprendente Iván Zulueta, guionista y director de la que puede considerarse primera película pop española: "Un, dos, tres, al escondite inglés", de 1970, experimento psicodélico en el que incluyeron tres temas.

En otras colaboraciones televisivas estrenaron uno de sus números más conocidos, "Lágrimas de cocodrilo". Empezaron a decir de ellas que eran "niñas bien", "chicas de Serrano", cuando en verdad necesitaban trabajar para su subsistencia: en sus familias no sobraba el "parné". A todo esto aún no tenían sobrenombre artístico. Reunidas en casa de Zulueta, barajaron llamarse Las Alegres Comadres de Aravaca o Las Monjas del Ultraverso, para al final de la reunión adoptar el definitivo de Vainica Doble. Y así se estrenaron discográficamente con el disco sencillo que contenía "La bruja" y "Un metro cuadrado". Que pasó inadvertido. Fue el tema de cabecera del programa 'Refranes', como más tarde otro dedicado a la cocina presentado por Elena Santonja lo que les permitió ser ya más conocidas.

El primero de los citados se incluyó en un disco para su segunda editora. En 1971 apareció su primer álbum en una línea de pop-folk donde se reunían temas como "Dime, Félix", "El duende", "Caramelo de limón", "Quién le pone el cascabel al gato"… En su siguiente álbum, "Heliotropo" reunieron joyas como "Coplas del iconoclasta enamorado", "Elegía al jardín de mi abuela", "Habanera del primer amor", "Dos españoles, tres opiniones"… Y después de esa grabación les llegó un largo silencio, a lo que ambas contribuyeron, sobre todo Gloria, quien no quería actuar cara al público ni someterse a giras de promoción. A ello habría que añadir que Gloria estaba preocupada por la salud de uno de sus hijos, enfermo de Asma y resolvió irse a vivir a Altea, lo que significó la ruptura temporal del dúo en 1974.

De nuevo Jaime de Armiñán las sacó del olvido, encargándoles la sintonía del programa Suspiros de España y la banda sonora del filme Furtivos. Ocasionalmente trabajaron de chachas en una escena de Patrimonio nacional, de Berlanga, en 1980. Pero ya cinco años antes habían decidido volver a grabar discos, el primero de los cuáles sería A contracorriente, en una línea más rockera. Sobresalía "Déjame vivir con alegría".

Por aquella época transigieron en programar una gira de una docena de conciertos, que a duras penas concluyeron porque la salud de Gloria era precaria, aquejada de una molestísima úlcera. Y entre eso y que no colaboraban en la promoción volvieron a cambiar de casa discográfica. Gloria se entretenía pintando y haciendo marcos para cuadros. Declaraban: "Nos asusta la publicidad y que nos reconozcan por la calle". A estas "alturas de la película", que diría un moderno, las empezaron a reconocer como "Las madres de la movida", por parte de los animadores de este acontecimiento socio-musical: Nacho Canut, Carlos Berlanga", Bonezzi, El Zurdo… En 1984 apareció su nuevo álbum, "Taquicardia", fue cuando popularizaron "Con las manos en la masa", la sintonía del programa culinario, donde colaboró, por cierto, Joaquín Sabina, en un insólito dúo con Gloria. No menos popular fue aquello de"… quisiera ser leucocito y navegar por tus venas".

Portada del disco

Trece años transcurrirían luego para la reaparición de Vainica Doble, ya Gloria dedicada enteramente a la pintura. En Cuenca abrió una tienda de marcos. En 1997 se volvieron a reunir con ocasión de un contrato con la multinacional Polygram. Alquilaron una casa en Almería y les salió el material de su nuevo disco, Carbono 14. Se despedirían con otro, ya el año 2000, En familia. Carmen moriría de cáncer ese año. Y Gloria se quedó sin su amiga y compañera del alma. Ahora, tristemente, se acaba de reunir con ella en el más allá.

En Cultura

    0
    comentarios