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Los del Río, más de 50 años cantando

Antonio Romero Monge y Rafael Ruiz Perdigones ganaron más de 15 millones de euros con "Macarena".

Antonio Romero Monge y Rafael Ruiz Perdigones ganaron más de 15 millones de euros con "Macarena".
La Macarena de Los del Río | Cordon Press

Los del Río están desde finales de 2014 con una gira que acabará de aquí a la primavera próxima aludiendo en ella el medio siglo que llevan actuando. En realidad han cumplido exactamente cincuenta y tres años, tomando como la fecha de su debut 1962 ante los micrófonos de Radio Sevilla. Ellos son amigos desde la infancia y se llaman Antonio Romero Monge y Rafael Ruiz Perdigones (el primero de los citados es quien luce cabellos blancos), naturales de Dos Hermanas (Sevilla), donde continúan residiendo. Cada uno es padre de cuatro hijos; éstos, han formado un grupo, Machucamba.

Los del Río han vendido millones de copias de su archiconocida "Macarena". Existen en el mercado un montón de versiones. Se enorgullecen de haber situado esa rumba pop flamenco-latina en el número 1 de las listas de la revista norteamericana "Billboard", durante catorce semanas seguidas, récord no alcanzado nunca por ningún otro artista español. Ello naturalmente les ha reportado unas enormes ganancias, tanto por la venta de discos como por derechos de autor.

Tan simpáticos como discretos, eluden confesar cuánto dinero han ganado con "Macarena". A finales de los años 90, cuando la pieza sonaba en medio mundo, sobre todo en los Estados Unidos, llegó a asegurarse que la pareja se había embolsado ¡mil quinientos millones de pesetas! Como quiera que el eco de "Macarena" aún no se ha apagado no es ninguna barbaridad especular que a día de hoy hayan podido ingresar en el banco quince millones de euros. O más, quién sabe. Podrían haberse construido una mansión de nuevos ricos en una isla de ensueño, pongamos por caso. Pero Antonio y Rafael son dos personas sencillas, que no hacen ostentación alguna y han preferido continuar viviendo en su pueblo en unas casas confortables pero nada aparatosas.

Se ocupan de sus respectivas familias, han dado estudios a su prole y continúan cantando como si tal cosa, cuando por el dinero reunido hasta el presente bien se merecían un descanso. Les encanta subirse al escenario, repartir alegría con sus rumbas, pasodobles, sevillanas, baladas aflamencadas sin sentirse cansados tras esos cincuenta y tres años como cantantes profesionales. Es curioso que el dúo Los del Río empezó siendo trío, cuando eran adolescentes, con el concurso de Alberto, un hermano de Rafael, que no creyó pertinente luego dedicarse a la canción en serio. Antonio era dependiente en una zapatería del pueblo y a veinte metros se encontraba Rafael vendiendo helados. En sus horas de ocio se iban a jugar a unos billares. Lo que más les atraía entonces era cantar sevillanas, copiando las que estrenaban Los Hermanos Reyes.

Probaron suerte en Madrid mediados los años 60. Por entonces cada actuación les reportaba a ambos cuatrocientas cincuenta pesetas, que descontados gastos enviaban por giro postal a sus familias. Pasaron penurias. El marqués de Cubas les echó una mano, proporcionándoles actuaciones en algunas aristocráticas residencias. De esa época fue la rumba "Chabely", que dedicaron a la hija de Isabel Preysler y Julio Iglesias. Lola Flores los contrató para su sala "Caripén".

Así es que ya en los años 70 Los del Río gozaban de una aceptable popularidad, dejaron sus respectivos oficios y se dedicaron a actuar y a ir renovando poco a poco su repertorio. Su creación de "Sevilla tiene un color especial", no compuesta por ellos, de la que es coautor uno de Los Morancos, les supuso un buen éxito. En décadas siguientes llegaron a actuar ante los Reyes en el Palacio de la Zarzuela, y en el Vaticano, ante el Papa Juan Pablo II.

"Macarena" fue compuesta en Venezuela durante una fiesta en casa del millonario Gustavo Cisneros. Allí conocieron a una chica guapísima, Diana Patricia. Antonio fue el primero en fijarse en ella, y le puso por nombre Magdalena para que rimase con cosa buena. Al volver a España e ir a registrar la rumba se encontraron con que ya existía una canción titulada "Magdaena, del mexicano Enmanuel. Entonces recurrieron a un apelativo tan sevillano como Macarena, al darse la circunstancia también de que una de sus hijas lleva por nombre Esperanza Macarena.

Que el entonces Bill Clinton utilizara las notas de "Macarena" para su campaña presidencial fue un inesperado golpe de fortuna para el dúo sevillano. Como también que la rumba sonara en varios eventos deportivos de los Estados Unidos, concretamente en los encuentros de la NBA. Los del Río tienen un estilo desenfadado, con su buen humor presidiendo todas sus actuaciones. Su público abarca dos y hasta tres generaciones, desde jóvenes a gente madura.

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