L D (EFE) La visita al Lazio, conjunto en lucha por zona Liga de Campeones, pasaba por ser casi la única esperanza de que un tropiezo interista viniese a reabrir una lucha por el título que parece sentenciada. Y la verdad es que, tras esta noche, está cada vez más muerta. Lo prueba no sólo el triunfo del Inter, sino que además la logró jugando toda la segunda mitad en inferioridad numérica ya que el sueco Zlatan Ibrahimovic se auto-expulsó (doble tarjeta) al final del primer periodo. A ese punto, con relativo equilibrio de fuerzas, los interistas ya iban por delante en el marcador merced a un tanto del argentino Esteban Cambiasso (m.39), hábil en resolver una serie de rechaces.
Pero la segunda mitad, pese a estar con diez jugadores, el Inter pasó menos apuros, con excepción de un par de disparos de Masimo Oddo (futuro milanista) bien detenidos por el meta brasileño Julio César. Pese a la inferioridad numérica y el pobre juego, el técnico interista Roberto Mancini se mostró ambicioso y quitó a un defensa, Maswell, para meter un delantero, Adriano. Otro dato de saberse muy superiores al rival. Y la jugada le salió perfecta, pues a poco del final Materazzi (m.85) sentenció la victoria de un Inter que marcha imparable, a ritmo de récord y cada vez más líder.
La Roma ganó en su visita al Torino (1-2) y sigue a siete puntos de distancia del Inter. Pero, a diferencia de los interistas, los romanos sufrieron más y eso que jugaron desde el minuto 26 en superioridad numérica, por expulsión del torinista Franceschini al salvar con la mano un gol visitante. Una acción que, junto a la expulsión local, trajo la pena máxima en favor de la Roma, pero Abbiati paró el lanzamiento de Totti. Once minutos después, sin embargo, la fortuna se alió con el capitán, que sin querer vio como un disparo de su compañero brasileño Mancini le daba en el cuerpo y traía consigo el 0-1 (m.37). La Roma ya pasó a controlar, pero el Torino no se entregó y pudo igualar. Sin embargo, a diez minutos del final, Mancini logró el 0-2 que sentenciaba. Eso sí, nueve después, Rosina devolvió la emoción y la incertidumbre con el 1-2.
Mucho más fácil, y sin jugar un gran partido, lo tuvo el Palermo, que goleó al colista Ascoli (4-0), con tantos de Bresciano (m.15), Corini (m.52), Tedesco (m.83) y Capuano (m.92). El conjunto siciliano sigue a once puntos del Inter. En el Milan, el brasileño Kaká despertó su faceta goleadora (m.4 y 88) y lideró a su equipo a un triunfo casero sobre el Catania (3-0), que llegaba como cuarto clasificado. Un triunfo más claro en el marcador que sobre el campo, pues los visitantes pudieron empatar en un par de ocasiones con 1-0 en el marcador. El segundo tanto milanista, el de la tranquilidad, lo hizo Alberto Gilardino (m.82), que también ha recuperado el gol. Al menos, el Milan suma puntos y goles, aunque sigue sin gustar.
También despega del fondo la Fiorentina, que se impuso en Cagliari (0-2) con dos tantos del goleador Luca Toni (m.32 y 74). Un tanto en el minuto 95, y jugando su equipo en diez, de Di Natale dio el triunfo visitante al Udinese en terreno del Atalanta (1-2); mientras que otro también al final de Tiribocchi (m.88) se lo dio en casa al Chievo Verona sobre el Reggina (3-2). Triunfos caseros, asimismo, del Empoli ante el Siena (1-0), en el duelo toscano, y de la Sampdoria contra el Livorno (4-1), pese a que los visitantes fueron los primeros en marcar.
Resultados de la decimoséptima jornada
Atalanta 1 - Udinese 2
Cagliari 0 - Fiorentina 2
Chievo Verona 3 - Reggina 2
Empoli 1 - Siena 0
Lazio 0 - Inter de Milán 2
Messina 1 - Parma 1
Milan 3 - Catania 0
Palermo 4 - Ascoli 0
Sampdoria 4 - Livorno 1
Torino 1 - Roma 2
