El Valencia, con tantos de Soldado, Stankevicius y Jordi Alba goleó a domicilio (0-3) al Almería, se afianzó en la tercera plaza y hundió un poco más al equipo andaluz, que dio otro paso atrás en su intento por conseguir la permanencia.
El partido comenzó con el Valencia tratando de hacerse dueño del balón y avisando con acercamientos al área defendida por Esteban. Con esas sensaciones se movía el partido, con el cuadro valencianista echado atrás, pero siempre que encaraba de mediocampo hacia arriba proponía acciones de peligro ante un Almería que recuperaba pronto, pero que perdía con iguala celeridad.
En la segunda parte, el arranque pudo marcar el destino, primero porque Piatti pudo hacer un golazo en un disparo que se marchó fuera por poco, pero fue Soldado el que, en el 50, se adelantó en el marcador y sentenció el partido. El Almería no tuvo fuerza moral para superar a un cuadro valencianista, que llevó el partido a su sitio y que en el 66 sentenció con un balón colgado al área que tocó Costa para que Stankevicius marcara. A partir de ese momento, quiero y no puedo de los locales. En el 80, jugadón de Joaquín con pase atrás para que Jordi Alba hiciera el tercero.
Un gol de Miku oxigena al Getafe
Un solitario gol del delantero venezolano Miku dio una ración importante de oxígeno al Getafe, que, con su victoria ante el Sevilla (1-0), consigue sumar tres puntos vitales para alejarse de los puestos de descenso. Con las alarmas encendidas por el acecho del descenso se inició un duelo crucial para las aspiraciones del Getafe. La peor racha que se recuerda en el club madrileño, que antes del pitido inicial sumaba una victoria desde que comenzó 2011 tras 16 partidos oficiales, fue la causante de una situación que tal vez no se esperaba en la entidad que preside Ángel Torres.
Con un rival muy incómodo enfrente al que doblegar para intentar arreglar la situación, las cosas no pintaban bien para los locales. Los andaluces son siempre muy molestos. Y así plantearon el partido. Sin embargo, ese sistema sólo funcionó para defender, porque en la primera parte, el Sevilla no hizo ni un disparo. Todo lo contrario que sus rivales, que, aunque a trompicones, y con mucho miedo en no tropezar, sí consiguieron inquietar al guardameta Javi Varas.
La misma tónica se repitió en los segundos 45 minutos, con el Getafe atacando a por el gol y el Sevilla esperando un zarpazo triunfal. Para desesperación de Míchel, Adrián Sardinero falló un clarísimo mano a mano que sacó Javi Varas y Miku erró en una volea a bocajarro que mandó a las nubes cuando tenía todo a favor para inaugurar el marcador. Por fortuna para los intereses madrileños, apareció Miku en el 76 para hacer una diana que vale su peso en oro. El venezolano dio tres puntos muy valiosos a su equipo. La permanencia está más cerca en la ciudad del sur de Madrid, mientras que el Sevilla se aleja del cuarto puesto, el que da acceso a la Liga de Campeones.
Baptista enseña el camino de la permanencia
El delantero brasileño Julio Baptista, autor de dos de los tres goles del Málaga ante el Real Mallorca (3-0), enseñó a su equipo el camino a seguir para lograr la permanencia en Primera División. El Málaga supo aprovechar la primera de las siete 'finales' que le quedan hasta el final de la temporada y, con un Baptista pletórico, superó con claridad a un Mallorca sin problemas clasificatorios y con gusto por el fútbol, informa Efe.
Aunque dominó en los comienzos el Málaga, la primera ocasión la tuvo el Mallorca con un remate de cabeza de Webó, tras un centro de Castro, que salió por encima del larguero por muy pocos centímetros. En el minuto 26 llegó el 1-0. Rondón se internó por la derecha y su centro lo aprovechó el uruguayo Sebastián Fernández para empujar el balón dentro de la portería.
Baptista encontró finalmente el gol (2-0). Recibió el balón en la frontal del área, buscó el hueco para el lanzamiento y, con la derecha y con efecto, sorprendió a Aouate. Era el minuto 40 y un buen Málaga desmembraba a un buen Mallorca. Pero a la cuarta ocasión, ya en el segundo tiempo, llegó el tercero del partido y el segundo de Baptista, tras una falta por la izquierda lanzada por Duda y que el brasileño remató de cabeza.