Mauro Gianetti y Josean Fernández Matxín, mánager general y director deportivo del equipo Geox-TMC, respectivamente, han negociado en los últimos días en Caracas la continuidad de la formación ciclista bajo el patrocinio de Venezuela, país de sueño.
Según Matxín, ahora sólo falta que el mismo Hugo Chávez, que se ha reunido con los dos exciclistas en los últimos días, dé el visto bueno a la financiación del nuevo equipo. "De momento todo va por buen camino y pronto sabremos algo. Sólo falta que él (Chávez) dé el OK", ha dicho el excorredor vizcaíno del Saunier-Duval, quien ha adelantado que el proyecto sería "para tres o cuatro años".
"Lo de Venezuela no se ha hecho de la noche a la mañana y es, como en esos otros casos, un proyecto de país", destacaba Matxín en declaraciones al diario Deia.
El propio Matxín también había comentado recientemente en su página de Facebook que espera que "esto sea el comienzo de un gran proyecto. El sueño puede convertirse en realidad desde un país de ensueño". Y adjuntaba una fotografía de una de las reuniones que han mantenido con Chávez y otros altos dirigentes venezolanos desde su llegada a Caracas.
El plazo de la Unión Ciclista Internacional (UCI) para presentar todos los documentos finaliza el próximo 20 de noviembre y Gianetti apura hasta el último momento tras el cese de patrocinio de la empresa Geox y que dejó sin equipo a 23 corredores. Entre ellos se encuentran el cántabro Juanjo Cobo, ganador de la pasada edición de la Vuelta a España, o el ruso Denis Menchov, que ganó la ronda español en 2005 y 2007, además del Giro de Italia hace dos años.
Ante la situación de inseguridad, otros corredores que militaban en el Geox ya han encontrado nuevo equipo: los colombianos Fabio Duarte y Mauricio Ardila militarán a partir de ahora en el Coldeportes de su país, mientras que el italiano Matteo Pelucchi se ha ido al Europcar.
Mientras tanto, la UCI ha seleccionado ya quince equipos con categoría World Tour, por lo que faltan por decidir tres más entre cinco candidatos. El Geox todavía podría ser uno de ellos. "En caso de no llegar a tiempo o no ser elegidos, lucharíamos por ser incluidos en la segunda división", admitía un resignado Matxín.