Impresionante partido el vivido en el Soccer City de Johannesburgo, probablemente el mejor en lo que llevamos de Campeonato. Desde el primer minuto se vio que tanto Ghana como Alemania se la jugaban y, cada una con sus armas, buscaron el gol y la victoria, en favor de un espectador que ha disfrutado de lo lindo.
El golazo de Ozil fue suficiente para la victoria germana, pero las oportunidades en una y otra portería fueron varias, y el resultado podría haber sido cualquiera. Al final se hizo justicia a lo visto en estos tres encuentros y, gracias a la victoria de Australia en Nelspruit ante Serbia (2-1), alemanes y ghaneses se clasifican para octavos. Los de Low se medirán a Inglaterra, en un choque espectacular, y los de Rajevac lo harán ante Estados Unidos.
Arranque espectacular de ambos
Mucho se había especulado con que Ghana saldría a buscar el 0-0. El empate, fuera cual fuera el otro resultado, clasificaba a los africanos. Pero nada más lejos de la realidad. Desde el comienzo se vio que los dos iban a ir a por el partido. Alemania lo intentó como lo viene haciendo durante todo el campeonato: tocando en corto, abriendo las bandas, y buscando el último pase de Ozil. Jugando bien al fútbol, vamos. Pero Cacau no es Klose, y los germanos carecieron de la profundidad necesaria.
Ghana, mientras fue fiel a su estilo. Perfectamente ordenada atrás, con mucha fuerza en la medular (donde, por cierto, se libró una batalla espectacular contra Schwensteiger, el mejor del partido, y Khedira) y saliendo rapidísima al ataque en cuanto se recuperaba el balón. Y así llegaron las primeras oportunidades, todas para Gyan, muy peligroso durante toda la noche.
Del 20 al 30 se vivieron los mejores minutos, probablemente, de todo el Mundial. Primero con una oportunidad de Annan, que se trabó con el balón cuando sólo tenía que disparar; a la contra llegó un mano a mano clarísimo de Ozil que, con todo el tiempo y espacio del mundo, no fue capaz de superar a Kingson. Y sólo dos minutos después, Lahm sacó bajo palos un remate de cabeza de Mensah. Partido roto, momentos espectaculares, pero el gol no llegaba.
El tramo final de la primera mitad fue más relajado, con los dos equipos con un ojo en el otro encuentro. Totalmente distinto fue el arranque del segundo tiempo, con Alemania totalmente volcada al ataque, en busca de ese gol que le garantizara el pase a octavos. Pero quien estuvo a punto de lograrlo fue Ghana, en el 50, con otra oportunidad inmejorable de Asamoah, que también se fue al limbo.
Llegan los goles en el Soccer City... y en el Mbombela Stadium
Esa ocasión metió el miedo en el cuerpo de los jugadores de Alemania, que dieron un paso atrás, hasta que apareció el genio. A Mesut Ozil le cayó un balón fuera del área y golpeó de forma impresionante, como sólo los jugadores de su clase pueden hacer, enviando el esférico al fondo de la portería sin que nada pudiera hacer Kingson.
A partir del tanto alemán Ghana buscó, sin fortuna, el empate, hasta que empezaron a llegar noticias de Nelspruit. Los dos goles de Australia daban casi por segura la clasificación de los africanos incluso con la derrota, pero el goalaverage pasaba a tomar relevancia, y era importante no encajar ningún gol. Fruto de ello, en el tramo final del encuentro apenas se jugó al fútbol: Ghana no quería que le marcaran, y Alemania no lo necesitaba, así que hubo tregua, el marcador iba a finalizar 1-0, y todos iban a estar pendientes de Nelspruit.
El gol de Serbia, a falta de cinco minutos, alteró los corazones ghaneses, en ese momento ya incapaces de volver a arrancar para buscar el gol. Cabía confiar en los socceroos y en Schwarzer. Se la había jugado Ghana, pero no merecía quedar fuera por eso. Y la fortuno le sonrió. Australia se impuso 2-1 a Serbia, y en el césped se pudo ver una curiosa imagen: alemanes y ghaneses fundiéndose en abrazos de celebración por haber pasado a octavos.
Hubiera sido injusto que Ghana, después de los tres partidos que ha realizado, no hubiese pasado a octavos. Muy probablemente, Alemania también. Hoy el fútbol sí ha sido justo, y eso no se puede decir todos los días. Eso sí, mucho ojo con los cruces: Alemania deberá medirse a Inglaterra, segunda del Grupo C, y Ghana a EEUU, la campeona del grupo. No, si al final los ghaneses (por cierto, el único equipo africano que pasa a octavos en el supuesto "mundial africano") son los que estarán más contentos...
Ficha técnica del partido
Ghana, 0 : Kingson; Pantsil, Mensah, Jonathan, Sarpei; Annan, Kevin Prince Boateng, Asamoah; Tagoe (Muntari, min 64), Ayew (Adiyiah min. 90), Gyan (Amoah, min. 82)Alemania, 0 : Neuer; Jerome Boateng (Jansen min.72), Friedrich, Mertesacker, Lahm; Khedira, Schweinsteiger (Kroos, min 81); Mueller (Trochowski min. 67), Oezil, Podolski; Cacau
Goles : Ozil, de disparo lejano (min. 61)
Árbitro : Carlos Simón (BRA), amonestó con amarilla a Ayew (min. 40) y a Muller (min. 43)
Incidencias: Partido de la última jornada del grupo D disputado en el estadio Soccer City ante 83.371 espectadores