El Barcelona Lassa pasó por encima del Panathinaikos (77-52), en un partido coral, en el que el técnico del club azulgrana, Xavi Pascual, dio una lección defensiva a su homólogo en el banquillo griego, Aleksandar Djordjevic, que no encontró soluciones para desenredar la telaraña catalana.
El conjunto catalán anuló a Dimitris Diamantidis y Nick Calathes y aprobó con un notable la primera gran prueba de fuego de la Euroliga en un Palau Blaugrana que vivió el mejor encuentro de los suyos en lo que va de temporada. Regresaba Aleksandar Djordjevic al escenario donde aún le recuerdan el cambio del azulgrana al blanco en su etapa como jugador. Esta vez lo hacía como entrenador de uno de los clásicos de Europa ante un Barcelona, en construcción, que buscaba convencer tras un inicio irregular en la máxima competición del viejo continente.
Comentaba Pascual en la previa que su equipo sólo ganaría a los atenienses con buen juego. Sus jugadores le hicieron caso y completaron el partido más equilibrado desde la consecución de la Supercopa de España. A diferencia de los últimos encuentros ante el Murcia y el Stelmet Zielona Gora, firmaron los azulgranas un inicio convincente. Intensos en defensa y certeros, por fin, desde el perímetro, conseguían una primera ventaja de seis puntos (17-11 tras el primer cuarto) de la mano de Stratos Perperoglou que, extramotivado ante su exequipo, lideró a los suyos con 8 puntos (2 de 2 desde 6,75 metros).
Con el gigante Miroslav Raduljica, su máxima referencia en la pintura, penalizado con dos faltas personales a los cinco minutos, ni Calathes ni Diamantidis encontraron el equilibrio en la dirección de su equipo, que sumó once pérdidas de balón en el primer tiempo (18 en total). A ello se sumó el poco acierto en triples (2 de 14). En el Barcelona, el reaparecido Justin Doellman, ausente en los dos últimos encuentros por molestias, asumía el rol anotador de Perperoglou en el segundo cuarto. El ala-pívot de Cincinnati, máximo anotador del partido con 13 puntos (once de ellos en el segundo cuarto), fue clave para que el Barcelona llegara a gozar de una máxima renta de 18 puntos (40-22, min. 17).
Apaciguó Djordjevic la sangría dando entrada a Raduljica, que con siete puntos mantuvo con vida a los atenienses antes del descanso (42-28). Reaccionó tras la reanudación el Panathinaikos. Parecía que con un parcial inicial de 0-7 (42-35, min.23) volvían los de atenas a entrar en el partido. La defensa, inexistente en el primer cuarto, impedía a los azulgrana anotar con la facilidad del primer tiempo. Sin embargo, volvió a aparecer Perperoglou desde la línea de 6,75 para desbloquear la situación.
El Barcelona volvía a situarse en la barrera de los 10 puntos, una ventaja que aumentó a 14 (55-41) tras una jugada espectacular entre Samardo Samuels y Tomic. El pívot jamaicano taponó en defensa, corrió como un alero hasta la zona del Panathinaikos y asistió sin mirar al croata que hundía la canasta. El Palau, casi lleno, enloquecía. La exhibición defensiva de los azulgranas se confirmó en el último cuarto. El Panathinaikos sólo pudo anotar nueve puntos, mientras que Abrines se daba un festín con tres triples con los que los catalanes confirmaban la paliza final.
Ficha técnica
FC Barcelona Lassa, 77 (17+25+13+22): Satoransky (7), Ribas (1), Perperoglou (11), Samuels (5), Tomic (11) -cinco inicial-, Navarro (8), Doellman (13), Lawal (2), Arroyo (6), Abrines (11) y Oleson (2)
Panathinaikos, 52 (11+17+15+99): Calathes (8), Feldeine (10), Pavlovic (7), Gist (13), Raduljica (9) -cinco inicial-, Charalampopoulos (3), Papagiannis (-), Diamantidis (-) y Fotsis (2)
Árbitros: Pukl (Eslovenia), Viator (Francia) y Latisevs (Letonia).
Incidencias: Tercer partido de la primera fase de la Euroliga disputado en el Palau Blaugrana ante 6.141 espectadores. Antes del inicio se guardó un minuto de silencio en memoria del exentrenador del equipo azulgrana Ranko Zeravica, quien falleció ayer a los 85 años