Siempre he pensado que el valor de The Fighter como película es inferior a los elogios que recibió, tanto de la prensa como del público. No está mal pero tampoco lo considera, ni si quiera, entre las mejores películas de boxeo. Entonces, ¿por qué la recomiendo? Para empezar, porque no tengo tanto ego como para ir en contra de la opinión casi unánime del resto del mundo. Y segundo porque, aunque el desenlace de la película es predecible, sí considero que merece la pena ver el extraordinario trabajo de Christian Bale.
El actor británico, que me tiene ganado desde Batman, se llevó el Oscar como mejor secundario en la edición número 83 de los premios de Hollywood. Está por encima del resto pero con esto no quiero, para nada, deslucir el trabajo de sus compañeros. Sin duda, The Fighter es lo que es, gracias a sus actores y no a su guión, a años luz de Rocky o Million Dollar Baby, por ejemplo. Mark Wahlberg está correcto, quizá no le favorezca la comparación con Bale. Pero hay que recordar que Amy Adams fue nominada a los Oscars como mejor actriz secundaria, premio que se llevó Melissa Leo, que también participa en la película como madre de Bale y Wahlberg.
Los dos actores dan vida a dos boxeadores que existieron en la vida real y es que la historia está basado en un hecho verídico que sucedió en los años 80 en Massachusetts, Estados Unidos. Christian Bale, es Dicky Eklund, un boxeador popular en la ciudad por haber tumbado a Sugar Ray Leonard. ¿Una leyenda? No. No llegó a ser campeón del mundo y cayó en el mundo de las drogas del que todavía no ha salido. Dicky, sin embargo, enseñó a boxear a su hermano pequeño, Micky Ward, que es Mark Wahlberg, una promesa del deporte que no acaba de despuntar por el famoso mal entorno. Entre su hermano y su madre le están hundiendo la carrera. ¿Alejarse de su familia y poder ser campeón del mundo o mantenerte con ellos? Ahí está todo el eje de la película.
En resumen, es una buena película con unas grandes actuaciones que podría haber llegado a más. Aun así, es una buena elección para estos días. Solo por ver a Bale y su cambio físico ya merece la pena.