La espectacular salida de los Mercedes y la mala estrategia de Williams han dado la victoria a Nico Rosberg en el Gran Premio de Austria, celebrado en el circuito Red Bull Ring de Spielberg. El piloto alemán hace más fuerte su liderato en este Mundial, con 29 puntos de ventaja sobre Hamilton.
El vencedor moral de la prueba ha sido, sin duda, Lewis Hamilton, que tras salir en novena posición ha terminado segundo en un final muy apretado con su compañero. Nuevo doblete, y van seis, de las flechas plateadas. Y eso que pudieron dar la sorpresa porque ambos coches han sufrido durante todo el gran premio problemas en los frenos.
Fernando Alonso ha sido el primer piloto con motor no Mercedes en ver la bandera a cuadros. Ha sido quinto, a 57 puntos de Hamilton en la clasificación general y a 86 del líder. Pudo luchar por la cuarta plaza con Massa y, de hecho, consiguió reducir la distancia a menos de un segundo con el brasileño en las últimas vueltas, pero la velocidad punta en las rectas que alcanzaban sus competidores le hizo desistir.
Williams no lograba un doblete en calificación desde 2003. Los monoplazas de Felipe Massa y Valtteri Bottas dieron este sábado muestra de estar a la altura de Mercedes pero, tras salir desde la primera línea de parrilla, bastante pronto, en lo que tardaron en realizar su primera parada, cedieron sus plazas a Rosberg y Hamilton. Aún así pueden estar felices en la escudería británica, que no conseguía subir al podio desde 2002.
Peor han ido las cosas a los Red Bull. Mientras que Daniel Ricciardo ha hecho una discreta actuación y ha sido octavo, Sebastian Vettel no terminó la carrera. El cuatro veces campeón del Mundo tuvo que retirarse en la vuelta 36 por un problema mecánico, en el que ha sido su tercer abandono de esta temporada.