Dicen que a la gente se le conoce realmente en los malos momentos. Aston Martin ha vivido una temporada llena de contrastes. Empezaron sorprendiendo, logrando ser la segunda mejor escudería, solo por detrás de Red Bull, pero llegó la crisis de resultados por la poca evolución de sus monoplazas y asaltaron las dudas.
El momento de máxima tensión en la escudería británica sucedió antes del Gran Premio de Brasil. Curiosamente, en Interlagos el resultado fue sorprendente -mágico podio de Fernando-. En Las Vegas también sumaron (12 puntos) y eso les ha llevado a acercarse a McLaren.
Aston Martin se centra en este final de temporada en conseguir superar a McLaren como cuarta escudería en el Mundial de constructores. Ahora mismo, los de Woking atesoran 284 puntos por los 273 del equipo de Fernando Alonso. Son solo 11 puntos de desventaja.
Ambición
Mike Krack, director de Aston Martin, se muestra muy ambicioso de cara al Gran Premio de Abu Dabi: "Sólo tenemos influencia sobre lo que hacemos nosotros y, en primer lugar, necesitamos tener un coche que sea rápido en Abu Dhabi, porque estamos por detrás. Así que no vamos a ir a la defensiva, tenemos que ir a por todas. Luego tenemos que hacerlo lo mejor posible en pista y ver cuáles son los resultados".
La exquisita actitud de Fernando... cuando peor iban las cosas
El luxemburgués considera que la involución que pasaron en el desarrollo de los monoplazas fue un duro palo que les ha venido muy bien para hacerse más fuertes: "Al principio fue como una luna de miel, y luego, cuando tuvimos momentos más difíciles como equipo, creo que eso sacó las verdaderas cualidades del equipo, de Fernando y también de Lance, nos mantuvimos unidos. Fueron tiempos muy complicados para nosotros. Lo bueno es que la relación entre nosotros se hizo todavía más fuerte", ha argumentado.
Krack pone por las nubes la actitud de Fernando cuando peor iban las cosas: "Ambos pilotos estuvieron de acuerdo sobre cuáles eran los principales problemas. Alonso siempre fue constructivo, con lo que sea y donde estuviéramos, ya sea en la fábrica o en la pista, siempre decía lo que pensaba, siempre decía la verdad, no se dejaba llevar por la emoción o lo que sea. Así que fue un placer verle actuar así", ha remachado el mandamás.