El alemán Marcel Kittel ha sumado al esprint la tercera victoria en las cuatro etapas disputadas en el Tour de Francia, lo que le ratifica como el gran dominador de las llegadas masivas.
La general no sufre cambios, con una llegada agrupada, y sigue liderada por el italiano Vicenzo Nibali, por delante del checo Peter Sagan.
Caída de Froome
Una etapa que empezó con susto para el británico Chris Froome (Sky), ya que el ganador de 2013 sufría una caída que le ha ocasionado heridas en el costado izquierdo que no le han impedido continuar en carrera.
Tras ser atendido desde el coche médico por la doctora Florence Pommerie, se ha conocido que Froome tiene dañada la muñeca y que "es pronto para determinar el alcance de la lesión". "Esencialmente son quemaduras producidas por el asfalto, pero se ha hecho daño. Habrá que esperar", precisó Pommerie.
Según el equipo, el líder del Sky, que se queja del golpe recibido, "no ha podido evitar la caída".
El pelotón marchaba compacto por el kilómetro 8 cuando Froome sufrió un enganchón que le condujo al asfalto, produciéndose heridas en la rodilla, codo y cadera de su costado izquierdo. El defensor del título cayó junto al holandés Bauke Mollema (Belkin). Ambos se levantaron de inmediato y pudieron continuar en carrera. Froome fue finalmente integrado al pelotón con la ayuda de dos compañeros del Sky, entre ellos el español David López.
Pero habrá que comprobar su trascendencia en la etapa de mañana, entre Ypres y Arenberg, con nueve tramos adoquinados que pueden convertirse en un infierno para un ciclista con la muñeca dañada.
El español Alberto Contador fue décimo octavo en la etapa, lo que le permitió ganar dos puestos en la clasificación general, en la que ahora es quinto.
Aunque ese dato no tiene importancia por la diferencia de tiempo, que sigue siendo la misma, la situación provisional de la general establece el orden de los coches en la etapa del día siguiente, lo que puede ser vital en los "pavés", ya que los afectados por caídas o averías mecánicas tendrán más cerca a su asistencia.
La etapa, en la que el francés Thomas Voeckler y el español Luis Ángel Maté estuvieron casi todos los kilómetros escapados, se saldó con un esprint masivo, después de que el galo fuera absorbido cuando faltaban 17 kilómetros.
El Shimano se mostró menos dominante en la preparación del esprint, lo que no impidió a Kittel mostrar que es muy superior a sus rivales en esa disciplina.
El noruego Alexandre Kristoff fue el encargado de lanzar el primer ataque y lograr unos metros de distancia, pero el germano puso de manifiesto que es más potente y logró adelantarle para sumar su séptimo triunfo en la ronda gala.