El nuevo futbolista de la Real Sociedad Asier Illarramendi ha admitido este miércoles en su presentación que no había previsto regresar "tan pronto" a su club de origen, pero ha aclarado que, en cualquier caso, "volver a casa, a la Real, nunca es un paso atrás".
Illarramendi ha sido presentado como nuevo jugador de la Real en el estadio de Anoeta, donde se ha vestido su nuevo uniforme -con el número 4 a la espalda- y ha saludado al millar de aficionados que han acudido al estadio para recibir al exmadridista.
Tras el saludo al público desde el césped, con vídeo de sus años de txuri-urdin incluido, Illarramendi ha comparecido en una rueda de prensa acompañado por el presidente de la Real, Jokin Aperribay, y el director deportivo, Lorenzo Juarros Loren.
El centrocampista guipuzcoano ha explicado que su marcha al Real Madrid, hace dos años, respondió a una "oportunidad que no podía desaprovechar" pero que siempre tuvo en la cabeza volver a su club algún día.
"Tampoco pensaba volver tan pronto, si soy sincero, pero ya dije que volvería", ha dicho el jugador de Motrico, quien ha comentado que deportivamente no ha podido triunfar en el Real Madrid porque le ha faltado la necesaria "continuidad".
"No han ido las cosas tan bien como me gustaría a mí, pero tan mal tampoco ha ido: he ganado cuatro títulos, he vivido experiencias, he conocido a gente nueva, he entrenado con los mejores del mundo", ha dicho Illarra, quien no ha tenido ni una sola palabra de reproche sobre su paso por el club blanco y ha asegurado que no se "arrepiente" de haber fichado hace dos años por el Real Madrid, al que ha expresado su agradecimiento.
"Deportivamente las cosas podían haber sido mejores, pero he estado a gusto, he conocido otro mundo, he aprendido muchas cosas", ha abundado, tras lo que ha asegurado que ha ganado "mucho en experiencia" al salir de su "zona de confort" y pasar dos años fuera de casa en un club tan grande como el Real Madrid.
Ha aclarado que al principio de la temporada no se había planteado salir de Madrid y que esperaba ganarse la confianza del nuevo técnico, Rafa Benítez, quien le comentó que contaba con él, pero "hubo otro fichaje" -en alusión a Mateo Kovacic, que ocupa su mismo puesto- y vio que "no tenía mucho sitio", por lo que cambió de opinión y decidió abandonar el Real Madrid.
Una vez adoptada esta decisión, "apareció la Real" y consideró que "era una oportunidad bonita" para volver a casa. "La decisión la tenía clara, para mí volver era una oportunidad bonita, siempre he creído que la Real es un gran equipo, hay un buen equipo y gran ambiente y he seguido en contacto con mis excompañeros", ha explicado el medio centro guipuzcoano.
Ha dicho que comprende a los aficionados realistas que se sintieron dolidos por su marcha al Real Madrid y ha admitido que le "dolió bastante" que parte de la afición le increpara cuando visitó Anoeta con la camiseta blanca, pero ha instado a los seguidores txuri-urdin a "remar ahora todos en la misma dirección".