El Manchester United, con dinero fresco y necesitado de dar alegrías a una desencantada afición -a la marcha de David de Gea se une los fichajes frustrados de todos los primeros espadas que ha pretendido el equipo de Van Gaal este verano-, rompe la banca.
El último día de mercado, como los malos estudiantes en la etapa de exámenes, los Red Devils intentan hacer los deberes. Además de ofrecer 100 millones por Arjen Robben al Bayern Múnich, el conjunto de Manchester ha contratado a Anthony Martial, delantero completísimo del Mónaco de tan sólo 19 años. Dinamismo, excelente capacidad de desmarque, primera zancada explosiva e instinto asesino -recuerda en su estilo de juego a su ídolo Thierry Henry-. Un crack en potencia, pero ¿para pagar 60 millones más 20 en variables?.
Para el Mónaco negocio redondo. Martial llegó al conjunto monegasco en el verano de 2013 procedente del Olympique de Lyon por 5 millones de euros.
Por cierto, ¿saben quien opera dentro del equipo del Principado? Bingo. Jorge Mendes.
Al United y a Van Gaal, el asunto de los fichajes se les ha ido completamente de las manos.