El Atlético de Madrid está tranquilo pese a los rumores que hablan de la posible marcha del Grupo Wanda, liderado por Wang Jianlin, del accionariado del club rojiblanco. Según fuentes consultadas por Libertad Digital en China, en el país asiático no se tiene constancia alguna de ningún tipo de variación en el plan de Jianlin a nivel futbolístico ya que es un elemento aparte de otros negocios que el magnate chino quería llevar a cabo en Madrid.
Nuevo estadio y expansión de la cantera
Hay que recordar que el Atlético de Madrid vendió el 20% de sus acciones al Wang Jianlin en un acuerdo cimentado en varias bases. Una de ellas es el traslado del Atlético del Vicente Calderón a la Peineta, estadio cuyas obras avanzan a buena velocidad, según informa diariamente el club madrileño. La posibilidad de abrir mercado y patrocinadores para la nueva casa del Atlético es uno de los proyectos que lideran el acuerdo con el magnate chino.
Los problemas que el Ayuntamiento de Madrid está poniendo al traslado a la Peineta tampoco preocupan a un Atlético consciente de que la indemnización que recibirían alcanzaría una cifra que gira en torno a los 200 millones de euros, cantidad que el ayuntamiento madrileño no quiere asumir.
El otro punto a tener en cuenta es la obsesión de Jianlin de expandir el fútbol chino en Europa y ha elegido al Atlético de Madrid para llevar a cabo su idea. El club ya realizó una gira por Asia (China y Japón) el pasado verano para dar a conocer su marcha y llamar la atención del aficionado asiático. La iniciativa, según ambas entidades, fue muy fructífera.
La apertura de escuelas en varios países del mundo demuestran que el proyecto es ya una realidad. El año pasado, el consejero delegado del Atlético de Madrid, Miguel Ángel Gil Marín, confirmaba la expansión del club: "Creemos en este modelo y por eso lo exportamos a otros países. En China pensamos que podemos ayudar a mejorar la cualificación de sus jóvenes futbolistas con nuestro modelo y experiencia".
Wang Jianlin tampoco está dispuesto a vender su paquete accionarial salvo aparición de una oferta irrechazable por parte de algún otro inversor de un poderío similar al suyo. El dueño del grupo Wanda mantiene intactos sus proyectos de expansión del fútbol chino y todo ello pasa por mantener sus acuerdos con el Atlético de Madrid.