La selección española ha completado una doble sesión este miércoles en La Ciudad del Fútbol, con trabajo de campo matinal y en el gimnasio vespertino, en un día en el que el seleccionador Julen Lopetegui comenzó a probar aspectos tácticos, con la posibilidad de apostar por defensa de tres ante Macedonia.
Sorprendió ante Albania apostando por una zaga con tres jugadores y Lopetegui está cerca de repetirlo en Granada, el próximo sábado ante Macedonia. Pese a no contar por lesión con los dos jefes de la defensa, Sergio Ramos y Gerard Piqué, ni con su lateral zurdo titular, Jordi Alba, el seleccionador comenzó las pruebas tácticas con esa idea.
Los elegidos serían Nacho Fernández, Marc Bartra y César Azpilicueta, que desde el día que ofreció la lista de convocados avisó Lopetegui que en esta ocasión acudía como central.
Tras la sesión de campo de la mañana, por la tarde los internacionales españoles se sometieron por la tarde a un estudio antropométrico, que muestra la repercusión de la alimentación en cada futbolista en su composición corporal y estado de salud. Posteriormente tuvieron un entrenamiento preventivo en el gimnasio, de refuerzo individual.
Crece en el cuerpo técnico del equipo nacional la preocupación por el estado de Diego Costa. El optimismo que reinaba a su llegada va cambiando con el paso de las horas. El delantero del Chelsea no pudo entrenarse con sus compañeros, cojea ostensiblemente y sigue con molestias por el hematoma que sufre en la ingle izquierda.
Su evolución en las próximas horas será definitivas para la decisión que tiene que tomar Lopetegui. Iba a ser el nueve titular ante Macedonia y posiblemente recibiría descanso frente a Inglaterra, pero los planes pueden cambiar sobre la marcha y ser Álvaro Morata el elegido, con Aritz Aduriz en la recámara esperando su oportunidad.