El trágico accidente, que dejó 9 muertos y decenas de heridos (algunos de ellos grave), se produjo en el partido que enfrentaba al Stade de Mbour y al Union Sportive Ouakam por la Copa de la Liga africana. Según informan los medios locales, un enfrentamiento entre las dos aficiones en las gradas, provocó que interviniese la policía con gases lacrimógenos y los espectadores que trataban de huir provocaron que uno de los muros cediese, al tratar de escalarlo, para refugiarse de dichos gases.
El incidente fue al término de la prórroga, tras vencer el Stade de Mbour por 2-1. El Gobierno senegalés ha anunciado la apertura de una investigación para verificar cuales fueron las causas de la avalancha en el estadio Demba Diop. Además, se ha decidido suspender toda actividad deportiva hasta que se celebren las elecciones legislativas el 30 de julio.
La vida política en el país ha quedado también paralizada. Varias manifestaciones y actos electorales que estaban previstas para el domingo se han cancelado. Seydou Gueye, portavoz del Ejecutivo, ha declarado que "el Estado llevará a cabo una investigación judicial para aclarar lo sucedido e identificar a los responsables del suceso. La ley se aplicará en todo su rigor".