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La magia de Isco desarma a Italia y acerca a España al Mundial (3-0)

El malagueño dio un recital y firmó un doblete. Morata hizo el otro gol. Villa volvió a jugar con la Selección tres años después.

El malagueño dio un recital y firmó un doblete. Morata hizo el otro gol. Villa volvió a jugar con la Selección tres años después.
Isco celebra junto a Jordi Alba e Iniesta uno de sus dos goles a Italia. | Cordon Press

Noche de fiesta en el Bernabéu. La selección española, bajo la batuta de un extraordinario Isco Alarcón, ha pasado por encima de Italia (3-0) para quedarse como líder en solitario del grupo G de clasificación para el Mundial de Rusia 2018. A falta de tres jornadas para el final de la fase de clasificación, el conjunto de Julen Lopetegui suma 19 puntos por los 16 que tienen los transalpinos. Muy por detrás figuran Albania (12), Israel (9), Macedonia (6) y Liechtenstein (0), la cenicienta de este grupo que será precisamente el próximo rival de España, el martes en Vaduz.

Fue un gran partido el de España, donde Lopetegui apostó por los jugones, con los Isco, Iniesta, Marco Asensio, David Silva... El seleccionador apostó precisamente por el canario como falso nueve, dejando en el banquillo a sus delanteros de referencia. Eso sí, los nueves puros también tuvieron su oportunidad en la segunda parte y lo aprovecharon: Morata marcó el definitivo 3-0 en la recta final, tras una gran jugada en la que se asoció con Sergio Ramos, mientras que David Villa volvió a jugar tres años después con la selección española, de la que se había retirado tras el Mundial de Brasil 2014. Pero lo del Guaje no fue un adiós, sino un hasta luego, y quién sabe si volverá a tener más oportunidades a las órdenes de Lopetegui.

Pero el gran protagonista de la noche no fue otro que Isco. El malagueño, que está en uno de los mejores momentos de su carrera, fue el líder de España no sólo por su doblete —golazo de falta y el 2-0 fue tras una gran acción personal, batiendo a Buffon con un disparo ajustado al palo, imparable para el veterano guardameta de la Juventus—, sino también por su ritmo para mover al equipo español y por sus jugadas de fantasía, como demostró en un caño que le hizo a Verratti.

España tuvo la pelota desde el pitido inicial y se movió con mucho dinamismo sobre el césped del Bernabéu, donde se volvieron a escuchar pitos a Gerard Piqué aunque también algún que otro aplauso. Italia no tardó en sacar a relucir su juego duro, como demostraron Verratti y Bonucci. Precisamente, de una falta del central del Milan sobre Marco Asensio nació el primer gol de la noche: peligrosa falta, cerca de la frontal del área grande, que Isco se encargó de transformar en pura magia, con un lanzamiento, superando la barrera, al que no pudo llegar Buffon.

Italia no se amilanó y Belotti, el poderoso delantero del Torino, tuvo en su cabeza el gol del empate con un remate en boca de gol, a centro de Candreva, aunque De Gea se lució con una espectacular parada. La réplica la puso minutos después Piqué con un testarazo, a pase de Koke, que se marchó por encima del larguero.

Italia había dado síntomas de que podía despertar, pero fue un espejismo. Porque el dominio del partido correspondió siempre a España. Bien movida por Isco e Iniesta, y con Silva y Marco Asensio sumándose a las ofensivas siempre que podían, el equipo de Lopetegui amplió su renta poco antes del descanso. A los 40 minutos, apareció el crack malagueño del Real Madrid en la frontal del área grande para irse de dos rivales y sorprender a Gigi Buffon con un disparo ajustado a la base del palo. Otro gran gol del futbolista del Arroyo de la Miel, que está de dulce.

Con el 2-0 se llegó al descanso. Italia salió tras el paso por vestuarios dispuesta a dar algún que otro susto sobre el marco rival —cabezazo de Belotti que salió desviado y remate de Insigne desviado por De Gea—, el peligro de Italia quedó en agua de borrajas porque España no tardó en volver a coger el toro por los cuernos. Más de lo mismo en la segunda mitad, con el conjunto local llevando el partido a sus intereses y con Isco dejando jugadas de fantasía, como el antes mencionado caño a Verratti.

Álvaro Morata, que había entrado por Iniesta, se sumó a la fiesta estableciendo el 3-0 a los 77 minutos: el delantero del Chelsea se asoció con Sergio Ramos, que sorprendió actuando en la jugada como extremo derecho y sirviendo un exquisito balón para que el ariete madrileño, en boca de gol, sólo tuviera que empujar la pelota a la red.

Los últimos minutos también sirvieron para ver en acción a David Villa, que ha vuelto a jugar con la selección española tres años después, así como un gol bien anulado a Morata por fuera de juego. El Guaje, que entró al campo por Isco —tremenda ovación para el malagueño—, se vio cómodo en los cinco minutos que estuvo sobre el césped del Bernabéu. Otro detalle más para que la fiesta fuera completa esta noche en el Bernabéu. El martes, en Vaduz, espera Liechtenstein, la cenicienta del grupo. El Mundial de Rusia 2018 ya está al alcance de la mano para la selección española, que esta noche ha enamorado frente a una Italia que llevaba once años sin perder un partido en la fase de clasificación para el Mundial. Se dice pronto...


Ficha técnica

España, 3: De Gea; Carvajal, Piqué, Sergio Ramos, Jordi Alba; Busquets, Koke, Iniesta (Morata, m.72); Isco (Villa, m.89), Asensio (Saúl, m.79); y Silva
Italia, 0: Buffon; Darmian, Barzagli, Bonucci, Spinazzola; De Rossi, Verratt; Candreva (Bernardeschi, m.70), Insigne; Immobile (Gabbiadini, m.79) y Belotti (Eder, m.70)

Goles: 1-0, m.13: Isco; 2-0, m.40: Isco; 3-0, m.77: Morata
Árbitro: Bjorn Kuipers (Holanda). Mostró tarjeta amarilla a los italianos Verratti (m.4) y Bonucci (m.12)
Incidencias: Partido correspondiente a la séptima jornada del Grupo G de la fase de clasificación para el Mundial de Rusia 2018 disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante 73.628 aficionados

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