El Atlético de Madrid ha revisado su proyecto a largo plazo y, sin ningún tipo de duda, ha priorizado la permanencia de su entrenador más allá de los jugadores que puedan venir o quedarse en la entidad madrileña. El líder del club se llama Diego Pablo Simeone y todo el mundo, incluyendo a los aficionados atléticos, saben que la presencia del argentino en el timón del equipo es lo realmente importante de cara al futuro.
Para retener a Simeone, la directiva del Atlético de Madrid se ha tenido que poner las pilas a nivel de fichajes, Vitolo ya está hecho y falta Diego Costa, y también en el plano económico. Muchos son los equipos que han tentado al argentino con ofertas escandalosas para sacarle de Madrid y todos ellos se han encontrado con el pensamiento del técnico de priorizar al Atlético por encima de cualquier otra cosa. Sin embargo y de forma lógica, Simeone necesita que su trabajo se vea refrendado monetariamente y para ello sus emolumentos han sido ampliados.
A partir del curso que viene, Simeone cobrará 15 millones de euros netos por temporada convirtiéndose de forma clara y con un amplio margen en el miembro de la plantilla que más cobra en el Atlético de Madrid. Es el buque insignia y desde el cuadro madrileño se le va a pagar como merece el referente del equipo.
Más allá del dinero que va a recibir el Cholo, el círculo más cercano del técnico está convencido de que la obsesión del argentino por conseguir la Champions con el Atlético está pesando mucho para continuar, además del amor que procesa al club. Después de dos intentos fallidos en Lisboa y Milán, Simeone quiere seguir intentando romper el maleficio de la Copa de Europa y para ello tendrá, si nada cambia, tres temporadas más.
Pese al acuerdo al que se ha llegado, el club deberá seguir ofreciendo al Cholo proyectos acorde con la ambición del argentino. Si esta premisa no se cumple, Simeone podría cambiar de opinión a final de cada temporada.