La Argentina de Messi está en un lío. La albiceleste se agarra al puesto de repesca sudamericano a falta de dos partidos para terminar esta fase de grupos, tras salvar un empate en casa ante Venezuela, colista de la clasificación para el Mundial de Rusia 2018.
Un gol en propia puerta de Feltscher empató el gol de Murillo que había adelantado a los venezolanos. El Monumental asistía estupefacto a como la vinotinto ponía contra las cuerdas a un equipo plagado de jugadores de renombre. Sorpresa con mayúsculas. Todos contaban con una victoria que nunca llegó ante un equipo que con éste, sólo ha sumado 8 puntos en 16 partidos de clasificación.
El jueves pasado Argentina también empató, esta vez sin goles en Uruguay, por lo que la racha complica la vida a una selección que suele partir como favorita en esta fase de clasificación y que ahora tiene un punto por detrás a Chile, también en apuros, para sacarla de la cita mundialista.
Una Argentina con la pólvora mojada, a pesar de los Messi, Dybala, Icardi o Agüero, se la jugará a primeros de octubre en casa ante Perú, selección que marca los puestos de clasificación directa al Mundial, y cerrará en Ecuador ante un equipo que a falta de dos jornadas sigue con opciones de pelear por una plaza en Rusia.