Hasta el Gobierno pone el grito en el cielo con el nuevo modelo de la camiseta de la selección española de cara al Mundial de Rusia.
La franja "azul petróleo" como la denomina el actual presidente de la Federación Española de Fútbol, Juan Luis Larrea, que con el efecto óptico se transforma en morada, ha levantado tan polvareda que desde la Moncloa han decidido actuar.
Larrea ha admitido que "hemos recibido quejas desde lo más alto. Al Gobierno no le hace gracia ni el lío ni la camiseta".
En el Gobierno ha sentado como un tiro el hecho de que Pablo Iglesias, líder de Podemos, elogiara públicamente la camiseta por las supuestas connotaciones republicanas que contiene. "No está el horno para bollos con este tema, y como tanto Iglesias como Garzón han hecho suyo el morado de la camiseta, pues eso no ha caído nada bien en las altas esferas".