Manchester City y Wigan Athletic han sido acusados este martes por la Asociación de Fútbol inglés (FA) de "no controlar" a sus respectivos jugadores en relación a la trifulca formada en el descanso del choque del pasado lunes en el que los de Pep Guardiola fueron eliminados de la competición tras caer 1-0.
Los jugadores de ambos equipos participaron en una tangana después de que Fabian Delph fuera expulsado en el minuto 45 por una dura entrada sobre Max Power. Los clubes, que recibieron las pertinentes observaciones, tienen hasta el viernes para responder a la dirección del torneo sobre los hechos acaecidos.
Además, algunos medios británicos informaron de que el delantero argentino Sergio Agüero no recibiría ninguna acción disciplinaria por su enfrentamiento posterior al partido con un fanático. El Wigan afirmó que llevarán a cabo una investigación completa después de verse algunas escenas desagradables después del pitido final, con proyectiles lanzados y aficionados lanzando vallas publicitarias sobre el terreno de juego.
"Aunque sabemos que la gran mayoría de los aficionados que corrieron al terreno de juego lo hicieron espontáneamente para celebrar una gran victoria, nos decepcionó la acción de una minoría de seguidores que actuaron de manera inapropiada. Realizaremos una investigación completa", declaró la entidad.
"Sin embargo, es importante no permitir que las acciones de unos pocos seguidores se resten a una noche increíble en el DW Stadium. Ambos grupos de seguidores crearon una atmósfera especial y el partido fue otro día memorable en la historia de Wigan Athletic", sentenció el club latic.