Andan en la cúpula directiva del Manchester United con la mosca tras la oreja después del fichaje de Alexis Sánchez, por 48 millones de euros más el pase del armenio Henrikh Mkhitaryan al Arsenal. El delantero chileno, de 29 años, era el gran objeto de deseo de José Mourinho, que deseaba hacerse con sus servicios a toda costa para, de paso, arrebatárselo a Pep Guardiola, quien también andaba tras los pasos del Niño Maravilla.
El caso es que Alexis, que ha firmado con los red devils por cuatro temporadas y media –hasta junio de 2022–, terminaba contrato con el Arsenal el próximo verano y le hubiera salido más barato al club de Old Trafford. Así lo asegura este domingo el diario El País, que añade que el empeño de Mourinho en su contratación ha sido clave. Pero no sólo eso. Y es que el diario de Prisa, en una información firmada por el periodista Diego Torres, asegura que el fichaje de Alexis refleja la "clase de conflictos que afrontan los clubes de la Premier League" ante la venta a la baja de los derechos televisivos para el próximo trienio (2019-2002).
En este sentido, esta venta a la baja de los derechos televisivos ha encendido las alarmas en toda la Premier y en concreto en Old Trafford, pues la contratación del chileno puede descuadrar las cuentas de la familia Glazer, propietaria del United.
Y es que, a partir de la temporada que viene, por cada partido emitido de la competición inglesa las televisiones pagarán 9,2 millones de euros frente a los 11,5 millones que se pagan esta temporada. Un recorte que supone un duro golpe a las expectativas de negocio. En este sentido, el crecimiento descontrolado de los gastos, especialmente de los salarios, está reduciendo los márgenes y provocando pérdidas.
Así, el diario The Guardian apunta que el United prevé al cierre de esta campaña unos ingresos de 650 millones de euros, de los cuales 400 millones serán destinados a salarios. Las cuentas no salen, y los Glazer ya empiezan a mirar con cierto recelo los caprichos de José Mourinho.
Y es que, de la noche a la mañana, Alexis ha pasado a ganar casi el triple de lo que cobraba en el Arsenal: 26 millones de euros netos por temporada, frente a los 9 millones que percibía en el club gunner. El tocopillano, que jugó durante tres temporadas en el Barcelona de Pep Guardiola (2011-2014), rompe la escala salarial del United. Alexis es desde ahora el jugador mejor pagado de la Premier League por delante de dos compañeros suyos en el United: el centrocampista francés Paul Pogba (17,1 millones) y el delantero belga Romelu Lukaku (14,8 millones).