El Bayern de Pep Guardiola sufrió un auténtico virus de lesiones durante buena parte de la estancia del técnico catalán en Alemania. Pep llegó a señalar como responsable al por entonces médico del conjunto bávaro, Hans-Wilhelm Müller-Wohlfahrt.
La tirantez entre ambos se palpaba en el ambiente. En la previa de un partido de Champions ante el Oporto, Guardiola lanzaba un dardo envenenado al cuerpo médico al referirse a las bajas con las que llegaba su equipo (Ribery, Robben, Javi Martínez, David Alaba, Bastian Schweinsteiger y Benatia). "La situación es la que es: a ellos les faltan algunos dedos de la mano y a nosotros las dos manos. Es una situación difícil, pero hemos convivido con ella durante dos o tres semanas, incluso diría que durante los últimos dos años. Es cuestión de adaptarse".
Una mala relación que tenía su punto álgido en un partido de la Copa alemana frente al Leverkusen, en el que el Bayern lograba el pase a las semifinales después de llegar a la tanda de penaltis. En ese encuentro, el técnico español se dirigía a su banquillo y recriminaba a su médico con evidentes gestos cuando Benatia caía lesionado. Guardiola humilló públicamente a un Müller-Wohlfahrt que llevaba en el conjunto bávaro desde 1977.
El doctor se vio obligado a abandonar el Bayern en 2015 por sus diferencias con Guardiola.
Ahora, años después, Müller-Wohlfahrt se toma su particular venganza contra el actual entrenador del City, en su autobiografía de la que este martes publica un adelanto el diario Bild. Las frases del médico no tienen desperdicio.
- "Guardiola me veía como un subordinado al que podía recurrir en cualquier momento"
- "Por una parte, Guardiola no se interesaba por cuestiones médicas. Por otro lado, esperaba de nosotros auténticos milagros"
- "Ya durante el mundial de clubes en Marruecos, a mitad de temporada, cualquier observador podía constatar que los jugadores del Bayern no estaban en forma".
- "Pep no prestaba atención a mis informes sobre jugadores lesionados".
- "Perdí por completo el control, le grité a Guardiola y di un golpe sobre la mesa que hizo que los platos y las tazas vibraran. Por primera vez en todos mis años de trabajo le grité a alguien. No podía entender que un entrenador que tenía tantos años de edad como yo de vida profesional no hiciera caso de mi experiencia".
Ya sin Guardiola, en octubre del año pasado, el Bayern readmitió a Hans-Wilhelm Müller-Wohlfahrt. Significativo.