
Diego Armando Maradona ha sido sin duda uno de los mejores jugadores de la historia, para muchos el mejor, pero dentro de su dilatada carrera tuvo momentos muy polémicos y no sólo lejos de los terreno de juego. En el Mundial de México de 1986 marcó dos goles que dieron la vuelta al planeta fútbol, uno con la mano y otro dejando por el camino a media Inglaterra.
Su famosa mano de Dios es para Argentina un símbolo de la picaresca en el fútbol, pero para otros, sobre todo en el caso inglés, es un reflejo más de las trampas que este deporte debería eliminar con el VAR. Precisamente sobre esa cuestión ha tenido que responder Maradona. Lo hizo ante la pregunta del exfutbolista Gabriel Pires.
"Me hubieran arrestado con el VAR, porque no puedes robar delante de 80.000 personas. Fue con esta mano. Hice 'tik-tik' y puse mi cabeza justo detrás. Terry Fenwick dijo '¡Es mano! ¡Es mano!" y yo le dije: '¿Qué mano? Díselo, es gol'", comentó Maradona.
El tanto, años después, sigue generando polémica y acompañará a la imagen del Pelusa toda su vida.