Neymar no ha tenido suerte en este último Mundial. El parón forzado tras la lesión que sufrió con el PSG, le mantuvo demasiado tiempo alejado de los terrenos de juego y lo ha acusado en estas dos últimas semanas de campeonato. Bélgica fue una apisonadora durante la primera parte y en la segunda estuvieron cerca de rozar la remontada, pero no sucedió.
Así se ha expresado el futbolista en una triste carta en su Instagram: "Podría decir que es el momento más triste de mi carrera. El dolor es muy grande porque sabíamos que podríamos haber ido más allá, teníamos la oportunidad de hacer historia... pero no fue esta vez".
Sin embargo, el mensaje más remarcado de todo este comunicado ha sido uno que tiene que ver con su motivación de cara a volver a jugar a fútbol: "Ahora es difícil encontrar fuerzas para querer seguir jugando a fútbol,pero estoy seguro de que Dios me dará esa fuerza suficiente para hacer frente a cualquier cosa. Por eso nunca dejaré de agradecer a Dios, incluso en la derrota".
Una motivación que podría regresar si, finalmente, su fichaje por el Real Madrid se hacer efectivo.
"Estoy muy feliz de formar parte de este equipo y me siento muy orgulloso de todos. Interrumpieron nuestro sueño, pero no lo sacarán de nuestra cabeza ni de nuestros corazones", concluyó Ney en su cuenta personal de Instagram.