Episodio racista en el fútbol colombiano. En concreto, ha ocurrido durante el partido del torneo Clausura que el Rionegro Águilas y el Once Caldas disputaron este martes en el Estadio Alberto Grisales de la ciudad de Rionegro (Antioquia), con victoria por 1-0 para el conjunto local.
El caso es que el entrenador del Once Caldas, Hubert Bodhert, denunció que el portero local, Lucero Álvarez, estuvo todo el partido haciendo comentarios racistas contra el delantero visitante Johan Carbonero, lo que enojó visiblemente al técnico cartagenero.
Pero la cosa no quedó ahí porque también entró en acción el presidente del Rionegro Águilas, Fernando Salazar, y lo hizo en la rueda de prensa que Bodhert protagonizó al final del partido. Mientras el técnico visitante tomaba la palabra, Salazar lo interrumpió constantemente para exigir "respeto" hacia sus jugadores, después de las duras acusaciones del técnico.
Hubert Bodhert no se mordió la lengua y no dudó en enfrentarse con el máximo dirigente del club local. Tras levantarse airadamente de la silla, el entrenador le espetó a Salazar: "Venga presidente y hablamos aquí; a mí no me venga a gritar, a mí me respeta también".
Bodhert continuó: "Lucero estuvo insultando a Carbonero todo el rato, diciéndole 'la puta que te parió'... insultando al pelao (...) Le digo que tiene que respetar porque nosotros no somos indígenas, hermano; nosotros somos negros, a mucho honor".