Kato organizó todo para estar en la Bombonera, ver el partido y regresar a Tokio. Sin emabargo, las condiciones metereológicas hicieron que el partido fuera suspendido. Isamu, que en su cuenta de Twitter tiene como eslogan la siguiente frase: "Cuando me muera no quiero nada de flores.Yo quiero un trapo que tengan estos colores" (en referencia a los colores de Boca, amarillo y azul), regresa a casa sin ver completado su sueño, ver a su equipo jugar una final de Libertadores ante su gran rival.
No a todo el mundo le fastidió el aplazamiento
En el caso contrario al de Kato tenemos a un argentino que se casó ayer sábado y cuya mujer se negó a poner una televisión en la celebración.
— Diego (@nocoincido) November 9, 2018
La cara del hombre era todo un poema. El destino, tan cruel con Kato, le brindó una sorpresa positiva al argentino, que este domingo, si la lluvia lo permite, podrá disfrutar del clásico de barrio.