
Leo Messi tiene una cláusula en su contrato que lo convierte en el único dueño de su futuro en el Barcelona. Si a final de este curso quiere marcharse lo puede hacer a coste cero y ese privilegio se extiende al resto de años de contrato que le quedan con la entidad azulgrana (2021). Es la noticia de la semana y no es para menos, ya que perder a tu estrella gratis podría destrozar el proyecto del FC Barcelona.
La afición azulgrana está de momento muy tranquila porque confía en su delantero, pero el presidente de la entidad, Josep María Bartomeu, debería estar muy atento a las necesidades de Leo y, sobre todo, no enfadar a su estrella. En una entrevista con el diario Sport, Messi manda varios avisos a la directiva. Uno de ellos sobre Neymar y su fichaje frustrado del pasado verano.
"Me hubiese encantado que viniese Neymar. Sinceramente, no sé si el Barça hizo todo lo posible para su regreso, pero es cierto que negociar con el PSG no es fácil. A nivel deportivo Neymar es uno de los mejores del mundo y con él, a nivel de imagen y espónsor, el club hubiera dado un salto. Nunca pedimos el fichaje de Neymar, simplemente dimos nuestra opinión. ¿Que si mando yo? Ha quedado demostrado que no es así", comenta Messi en la entrevista que ha concedido al diario Sport.
Messi no está contento con el tema Neymar y tampoco lo está con no ganar la Champions. Se quiere quedar en el Barcelona, pero con un contexto en el que pueda ganarlo todo: "Esta es mi casa y no quiero irme, pero quiero ganar".
También hay que destacar otro de los recados hacia la directiva. Para Leo aún no hay estabilidad institucional y tiene claro quién debe entrar en el Barcelona: "Sería bueno para el club que hubiera una estabilidad y no tantos cambios en la estructura deportiva. Puyol sería ideal como secretario técnico".