Cerca de 200 seguidores del Manchester United han burlado este domingo la seguridad de Old Trafford y han entrado este domingo en el estadio, algo prohibido para el público por la pandemia de coronavirus, para protestar por las actuaciones de los propietarios del club, la familia Glazer.
Miles de seguidores de los red devils se dieron cita en los aledaños del estadio, que este domingo tenía que haber acogido el clásico de la Premier League ante el Liverpool (a partir de las 17:30, hora peninsular española), para mostrar su descontento con los Glazer, sobre todo tras el visto bueno de estos al proyecto frustrado de la Superliga europea.
De esta forma, el partido United-Liverpool queda aplazado y a partir de ahora se trabajará en encontrar una nueva fecha para el encuentro.
"Tras hablar con la policía, la Premier League, el ayuntamiento de Mánchester y los clubes, el partido contra el Liverpool se ha pospuesto debido a las preocupaciones por la seguridad después de las protestas de hoy", ha dicho el United en un comunicado. "Entendemos completamente el derecho de nuestros aficionados a ejercer su libertad de expresión y a realizar una protesta pacífica. Sin embargo, rechazamos el trastorno hacia el equipo así como las acciones que han puesto a los aficionados, a los trabajadores y a la policía en peligro", añadió el club de Old Trafford.
Algunos de esos seguidores lograron derribar las vallas, superar a los guardias de seguridad y entrar en el recinto a través del Túnel de Múnich. Tras ello, saltaron al terreno de juego e incluso lanzaron bengalas al palco.
A la cancha, invasión de hooligans en Old Trafford.
Protestan contra los dirigentes del club.
El United - Liverpool puede suspenderse. Partido clave para la coronación del City.
— Luis Omar Tapia (@LuisOmarTapia) May 2, 2021
Los aficionados podrán regresar a los estadios el próximo 17 de mayo, según anunció esta misma semana el primer ministro Boris Johnson, una medida que les permitiría presenciar la última jornada de la Premier League.