El gran héroe de esta Eurocopa, Morten Boesen, médico de la selección de Dinamarca, que salvó la vida de Christian Eriksen con su rápida reanimación cardiopulmonar, compareció en sala de prensa junto al seleccionador danés Casper Hjulmand.
"Hemos hablado con el jugador un par de veces. Sigue estable y, dadas las circunstancias, está bien. Seguirá en observación y las pruebas están bien, parece. A los jugadores les causó una gran impresión que pudiéramos hablar con Christian. Está de buen humor y los jugadores le han hablado".
Boesen asegura que aún se desconocen los motivos del desvanecimiento de Eriksen: "No puedo decir con exactitud qué le paso. Está despierto, responde de forma relevante y el corazón late. No tenemos explicación a lo que sucedió".
El galeno fue contundente en sus explicaciones y aseguró que el jugador del Inter llegó a estar muerto y que gracias a la descarga de un desfibrilador pudo revivir: "Christian estuvo muerto en algún momento. Tuvimos que empezar con un masaje cardíaco y una reanimación porque se había ido. Todo sucedió en un momento, así que no sé muy bien qué decir. Hubo un paro cardíaco y fue revivido con una descarga de un desfibrilador".
Eriksen levanta el ánimo de sus compañeros
Los compañeros de Eriksen pudieron hablar con Christian por vídeo llamada: "Hablamos todos con él esta mañana por videollamada y vimos su sonrisa en la pantalla. Y entonces, dice: '¿Cómo estáis? Creo que estáis peor que yo. Me siento como si tuviera que salir a entrenar ahora'", reveló en rueda de prensa con una sonrisa el seleccionador danés, Kasper Hjulmand.
Hjulmand calificó la observación del centrocampista del Inter de Milan como algo "típico" de Christian: "Pensar antes en los otros que en él mismo". "Christian quiere que sigamos jugando, así que lo vamos a hacer. Vamos a jugar por Christian", afirmó.
El técnico danés dijo que van a tratar de "recuperar la normalidad" y de reanudar este lunes los entrenamientos, pero es consciente de que a algunos jugadores les va a costar más que a otros, aunque todos están recibiendo ayuda psicológica.
"Christian está en buenas manos, nuestro trabajo es levantarles el ánimo a los jugadores y que estén listos para el jueves (para el segundo partido contra Bélgica)", destacó.
El máximo responsable de selecciones de la DBU, Peter Møller, insistió en que poder hablar este domingo de nuevo con el '10' de Dinamarca supuso "un enorme alivio" para sus compañeros e incidió en enviar un mensaje positivo.